REAL MADRID CF 7 - SEVILLA FC 3. UN COMANDANTE EJEMPLAR.

   

Cristiano comanda el ataque blanco.

Para los detractores de los horarios, jornadas intersemanales y desigualdad de nuestra liga, el partido de ayer fue como un pisotón en un dedo calloso, espectáculo, goles y muchos detalles a destacar en los dos equipos, pero sobre todo por parte del Real Madrid. Mientras la opinión pública futbolera seguía debatiendo, sobre la reciente actuación cómica de "Blatter de la Calzada" no ridiculizando a Cristiano, sino ridiculizándose a sí mismo y evidenciando demasiada edad, para comandar el fútbol mundial, Cristiano se engominaba y se ponía al frente de sus compañeros. 

Pero irrelevancias aparte, sería absurdo perder una sola línea más, en comentar otro hecho que no fuera el partido de ayer y los diez goles marcados, la valentía del Sevilla de Emery, el hat trick de Cristiano y los dos goles de Gareth Bale. 

Con un once más agradable de ver, que el que se enfrentó al Barcelona en el pasado clásico, Carleto volvía a confiar en los habituales, con el cambio de Varane por Pepe y Bale por Di María, Benzema recuperaba la punta del ataque y Khedira con Illarra arropaban a Isco tornando el de Arroyo de la miel al once inicial. 

Por su parte, el entrenador vasco mostró su cara más valiente, la que siempre ha mostrado frente al Real Madrid y Barcelona, con un centro del campo fuerte pero hábil y 2 balas arriba, buscando las incursiones por banda que luego le dieron sus frutos, destacando a Alberto Moreno y sobre todo a Rakitic. 

Comenzó el partido y ya en el minuto 3, Isco, tras 2 paredes entre Arbeloa, Bale y Benzema, recibió del francés y a punto estuvo de batir a Beto, pero su toque cruzado salió rozando el palo derecho; Pero ayer el jugador galés de los 100 M, empezó a ser el actor coprotagonista y recibió un pase dentro del área de Karim, otro de los destacados, para acomodarse el balón a su larga pierna izquierda y rematar con efecto para marcar el primer gol, un golazo que sacaba una sonrisa al de Cardiff y probablemente le aliviará de cierta presión injusta y desmedida sufrida hasta ahora por el frente anti-Florentinista. Y así fue, porque también la suerte se alió con el ex del Tottenham, cuando 12 minutos después, en una falta que Ronaldo cedió generosamente para que lanzara su compañero, el disparo reboto en Moreno desviando directamente al fondo de la portería sevillista, 2-0 y estallaba el delirio general. 

Con el ambiente blanco y limpio, Cristiano estaba tardando en saltar al escenario y Teixeira Vitienes, en un día malo malo, señalaba una falta a Isco fuera del área (muy justa eso si) como pena máxima y le daba la oportunidad al luso de inaugurar su marcador particular, y así lo hizo marcando el tercer gol en tan sólo media hora, lo que parecía sentenciar el choque. Pero los desbordes de Moreno por la izquierda, con la ayuda de Vitolo y de Bacca (muy buena pinta la del colombiano) seguían haciendo daño a Arbeloa, que ayer no estuvo nada acertado, aunque poco después del gol del Madrid el peligro llegaba por banda derecha y Figueiras recibía dentro del área, dominios de Sergio Ramos, que en un momento de madurez importante pero en un momento deportivo muy bajo, entro en la cacharreria y como acostumbra, fue al jugador y no al balón, derribo muy leve que parecía penalti aunque no lo fuera. El jugador más destacado en las filas del Sevilla, el croata Rakitic transformaba aunque Diego López rozó el disparo y ponía el 3-1 en el electrónico, lo que no asustaba demasiado teniendo en cuenta el vendaval desatado hasta el momento; Pero lejos de ser un espejismo y pasados 2 minutos, esta vez si, en desborde por la banda izquierda (derecha madridista) los de Emery protagonizaban otra jugada de velocidad con Vitolo, que por abajo centraba a Jairo, para que éste, más rápido (otra vez) que Sergio Ramos, se anticipara al camero y habilitara a Bacca para marcar el segundo para los andaluces. 

Se retiraban los 22 al vestuario con sensaciones enfrentadas y un Bernabéu que no sabía si celebrar, aplaudir o callar, esperando no tener que silbar. 

Comenzó el segundo tiempo con 3 o 4 minutos de relax, hasta que Diego López, en un gran estado de forma pero sufriendo la desprotección de una defensa blanca muy vulnerable esta temporada, acometió un paradón de balonmano y salvó el gol cantado ante Jairo, además sacó rápido para Cristiano, que corrió y pasó a Bale para que éste, centrara a Benzema anotando el primero de su cuenta y comprar una semana de aplausos y un cuarto de paciencia a su afición. 4-2. 

Los blancos querían más y Bale, todavía con fuelle en la banda derecha, se anotaba su segunda asistencia y le servía otro gol en bandeja al jefe, Ronaldo, que sumaba un doblete y ascendía de comandante a general sin pasos previos. 5-2. Como decía un famoso conejo: "No se vayan todavía amigos, aún hay más" y Rakitic enganchó un zurdazo en la izquierda, que entró como un obús por el palo contrario, sin que nada pudiera hacer el portero gallego, golazo de uno de los jugadores de la liga que mantenía viva la fiesta y cada vez se animaba más. 5-3. En medio de tal disparate, Xavi Alonso saltaba al campo casi 4 meses después de sus dos lesiones y su pupilo, Illarramendi, era el que le cedía el sitio a su mentor. 

Sin tiempo para celebrar los goles, CR7 se adentraba en el área entre dos defensas y remataba con rabia tapado por un central pero el balón, rebote incluido, entraba despistando al portero portugués. 6-3. Hasta el juez quería salir en portada y Teixeira veía otro penalty inexistente de Cristiano a Figueiras, pero Rakitic golpeaba mal y enviaba al anfiteatro la oportunidad de volver a acercarse y romper el partido, sino lo estaba ya; En medio de los resoplos M,Bia se iba a la caseta por la segunda amarilla, por un manotazo al recién ingresado Modric sin ánimo de agresión alguno, pero impactando directamente en la cara del croata. 

Con un penalty fallado y un jugador menos, sumado a un gran esfuerzo a remolque, Marcelo llegaba casi al fondo, para poner un centro perfecto en la cabeza del francés, que completaba un gran partido y marcaba su segundo de gol con un buen cabezazo. 7-3. Pitido final y el Bernabéu repartía honores con un triunfador claro, Cristiano, pero Gareth Bale se quedo en el centro del campo, agradeciendo el apoyo y el estadio le devolvía el detalle con una fuerte ovación por el esfuerzo realizado y colmarle de confianza. 

"Eso es todo amigos" 


FICHA TECNICA:  

ALINEACIONES: 

REAL MADRID: Diego López; Arbeloa, Varane, Ramos, Marcelo; Illarramendi (Xabi Alonso, min.64), Khedira (Di María, min.82); Bale, Isco (Modric, min.71), Cristiano y Benzema. 

SEVILLA: Beto, Pareja, Carriço, Fernando Navarro, Diogo Figueiras; Rakitic, Mbia, Alberto Moreno, Jairo (Perotti, min.62); Vitolo (Reyes, min.82) y Bacca (Gameiro, min.62). 

ESTADIO: Santiago Bernabéu: 66.836 espectadores Goles: Bale (14' y 26') C.Ronaldo (31' P. 60' y 72') Benzema (53' y 89') Rakitic (38', P. Y 63') Bacca (40') 

ARBITRO: J.A. Teixeira Vitienes (Colegio Cántabro) Amonestó a Sergio Ramos (37', acarrea sanción) Arbeloa (65') y Khedira (66'); A Alberto Moreno (25') Pareja (93') y expulsó a M,bia por doble amarilla (58' y 76'). 

Fdo: Toni SPK.

RC CELTA 0 - FC BARCELONA 3. C´EST LA VIE.

Cesc, bigoleador en la noche de ayer.

C´est la vie (la vida es así) pues al final el pez grande se ha comido al chico como ocurre la mayoría de las veces. Y es que volvía el fútbol en una nueva jornada del campeonato nacional porque, si señores, más allá del clásico también hay vida. 

El Barça acudía a Balaídos tras los últimos ecos del clásico para afrontar un partido trampa por ser de esos partidos en los que, tras venir de competir en un duelo de máxima intensidad, a veces cuesta volver a meterse en el papel para dar lo mejor de sí ante un equipo que supuestamente partía como víctima propiciatoria. Si a eso le sumamos que, tras su gran partido del pasado fin de semana infligiéndole un 0-5 al Málaga, el conjunto celtiña venía con un aporte extra de motivación tras la inyección de moral que había supuesto dicho resultado en feudo visitante y que además el Tata Martino iba a hacer rotaciones, alineando a gente menos habitual, el partido prometía. 

 El público vigués acudía expectante con ganas de comprobar los progresos de su equipo al que su técnico Luis Enrique, otrora uno de los símbolos del barcelonismo, intenta ensamblar un estilo de buen gusto por el fútbol con ese carácter guerrero que le había caracterizado en su época de jugador y que antaño había dejado huella por parte de las tribus celtas en su conquista de las tierras gallegas. 

El duelo comenzaba como se esperaba con un Barcelona muy remozado en su once alineando a un equipo de menos toque pero más físico con gente como Song en el medio del campo en detrimento de Xavi. Era un equipo que hacía presagiar un fútbol de menos control pero más fortaleza física para recuperar rápido y salir con velocidad intentando aprovechar a la contra la velocidad de sus tres delanteros (Alexis, Messi y Pedro) con el fin de sorprender pronto a su rival intentando cerrar rápidamente el partido cumpliendo así el expediente cual obrero que acude a diario a su trabajo dejando a un lado el fino estilismo y a fe que lo consiguió pues en el minuto 9 del encuentro un Alexis Sánchez enrachado abría la lata del conjunto local haciendo subir al marcador el primer gol del encuentro tras aprovechar un rechace de Yoel a un tiro de Cesc tras una combinación con Pedro. 

 Tras ese gol y con el duelo abierto con un Celta yendo a tumba abierta al ataque, buscando las rápidas contras, el partido había entrado en una fase alocada yendo de área a área en cada jugada disfrutando el Barça de varias llegadas por mediación de Messi, Pedro o Alexis y también el Celta de otras que exigieron a un seguro Víctor Valdés y donde la más clara fue una doble oportunidad en el minuto 21, cuando Charles habilitó a Nolito para que se jugara el uno contra uno con Alves en el borde del área y donde, a continuación, el brasileño del Barça perdió el esférico rematando Charles un disparo ante el que Puyol se interpuso. 

A partir de ahí fue nuevamente Charles quién lo intentó en un disparo escorado y algo blando que blocó Valdés (26') y Rafinha el que dispuso de dos nuevas oportunidades en apenas un minuto (29') saliendo una muy cruzada y siendo la otra blocada en dos tiempos por Valdés. Pasaban los minutos y aunque las llegadas del Celta no derivaban en claras oportunidades el Barça tampoco se hacía dominador del tempo de un partido en el que Adriano, jugador que ya llevaba demasiados partidos sin lesionarse, tuvo que retirarse en el minuto 31 por molestias musculares dejando su sitio a Montoya. De ahí al descanso lo más destacado, resultado aparte, fué una última oportunidad de Leo Messi quien se lanzó a rematar un centro de Dani Alves que no pudo ajustar, un Leo al que hoy se le vio en muchas fases muy individualista buscando con ansiedad el gol, no eligiendo en muchas ocasiones la mejor opción cegándose en el intento por conseguirlo. 

La segunda parte comenzó con un Barça igual de enchufado que en los comienzos de la primera, saliendo de los vestuarios con ganas de volver a sorprender rápidamente al rival, lográndolo Cesc a los dos minutos de la reanudación tras sorprender con un trallazo desde la frontal, de esos con los que antaño marcaba tantos goles en el Arsenal y de los que pocos se ven en el Barça, tras una combinación entre Messi y Song y estrellándose este en el larguero para rebotar después en la espalda del portero del Celta colándose así en la meta rival. Posteriormente el Celta intentó replicar con un disparo a la media vuelta de Charles que blocó Valdés intentando marcar ese gol que le permitiese volver a soñar en el partido. Fue un espejismo, pues tres minutos después (en el min. 54) era el propio Cesc, omnipresente en ataque con sus llegadas para finalizar o asistir, el que sentenciase la contienda tras rematar disparando raso y ajustado al palo derecho de Yoel, en las cercanías del área pequeña, un pase de Leo Messi tras conducir un rápido contragolpe. 

 Tras el 0-3 ambos entrenadores moverían sus banquillos entrando en una espiral de cambios. Con ellos el Barça buscaba rotar para dar descanso a los suyos y el Celta para intentar reactivar al equipo en unos minutos en los que seguía viéndose un juego un tanto desordenado y vertical. 

 A partir de ahí lo más destacado fue el poder comprobar el gran partido de un Alex Song cada vez más adaptado a su rol en el juego del conjunto barcelonista así como los progresos de un Marc Bartra, cada vez más entonado, y de un Puyol que no parece que haya estado tantos meses alejado de los terrenos de juego formando entre ambos un tándem muy solvente en el eje de la zaga barcelonista que hoy había dado descanso a Piqué y Mascherano. Aún así el Celta dispondría de una buena y última oportunidad al enviar Nolito un lanzamiento de falta que se estrelló en el palo (67') y el Barça de otras tres para ampliar el resultado con una de Pedro tras disparar al larguero (73') y con dos de Messi tras dos de sus clásicas galopadas en los minutos 80' y 91 sin que el marcador se moviese. 

Finalmente el partido terminó con el Barça dominando el balón, dejando pasar los minutos sin querer ensañarse con su rival, y con un Celta resignado ante la efectividad de Alexis y un Cesc que hoy se reivindico tras unos partidos un tanto oscuros sacando a relucir todo su talento y su pegada para decidir el encuentro.

FICHA TÉCNICA: 

ALINEACIONES:

RC CELTA: Yoel; Hugo Mallo, Cabral, Fontàs, Aurtenetxe (Toni, Min. 55); Álex López, Oubiña (c), Rafinha; Augusto Fernández (Mina, Min. 59), Charles y Nolito (Orellana, 68'). 

FC BARCELONA: Valdés; Alves, Puyol (c), Bartra, Adriano (Montoya, Min. 31); Busquets, Song, Cesc (Iniesta, Min. 69); Pedro, Messi y Alexis (Tello, Min. 83). 

ESTADIO: Balaídos, unos 29.000 espectadores.

ARBITRO: David Fernández Borbalán (Comité Andaluz). Asistido en las bandas por Jesús Calvo Guadamuro y Jorge Canelo Prieto (Comité Andaluz). Cuarto árbitro, José Antonio López Toca (Comité Cántabro). Mostró tarjetas amarillas a Rafinha (Min. 23) por una entrada por detrás a Alexis; a Cesc (Min. 30) por protestar; a Augusto Fernández (Min. 34) por una falta sobre Montoya; a Cabral (Min. 38) por derribar a Pedro.

Fdo: Jesús Martinez.

F.C. BARCELONA 2 - R.MADRID 1. DE CHIVOS Y PERROS.

 

Sin duda lo mejor de la noche, el gol de Alexis.

El Pueblo de Israel celebraba antiguamente un ritual por el que se elegían dos chivos, uno era sacrificado como ofrenda a Yaveh, al otro lo corrían a pedradas soltándolo en el desierto para que se muriera, ese era el chivo expiatorio, el que encarnaba al mismísimo Azazel por lo que era culpable hasta del copago sanitario. Don Carlos Rodríguez Braun, doctor en Ciencias Económicas y catedrático de Historia del Pensamiento Económico, un tipo de mente tan despejada como su frente, parió una frase que suena a sentencia y que cada día que amanece se confirma: “el mejor amigo del hombre no es el perro, es el chivo expiatorio”. Pasen y vean la de perros y chivos que vimos ayer.

Cerca de noventa y nueve mil almas levantaron un mosaico precioso en el que se animaba a Tito mientras se cantaba el himno a capela, demasiado ambiente para tan poco Barça, pues venía de empatar en Milán y Pamplona dando una imagen muy gris. Pero para gris la cara de Ramos cuando le dijeron que lo ponían de medio centro. El de Camas hizo lo que pudo, pero no es lo mismo jugar de cara al balón para destruir, que tener que hacerlo de espaldas a portería y controlar los espacios para que el equipo funcione, daba la sensación que se jugaba al despiste, y para despiste el blanco en toda la primera parte. Precisamente protestó mucho el Barcelona las entradas de Ramos a Neymar, al que despeinó dos veces en el mismo minuto, una con el codo y otra con un manotazo, los culés ya tomaban nota por si luego tenían que echarle la culpa a alguien. Un Barcelona muy perro, con muy poco, sometió al Madrid que solo intentaba contragolpear con sus tres estoques demasiado alejados de la zona de creación. Cuando la parroquia merengue ya tenía claro que Don Carlo era el culpable de la imagen de su equipo, el chivo expiatorio perfecto, llegó el primero, lo único reseñable hasta las siete de la tarde. Neymar, voluntarioso como siempre, recibió de Iniesta y dio un pase al interior de la red que Diego López vio pasar sin inmutarse. La culpa la cargó el pobre de Carvajal, que le tapó la visión y encima recibió un balonazo en una parte muy importante de su anatomía, no se quejó a pesar de que señores, esas cosas duelen. Estábamos en el dieciocho, delirio culé con cierto cargo de conciencia, se había trabajado muy poco para el premio. 

Unos minutos explosivos en los que el Barça pudo machacar el marcador, dieron paso a una cierta recomposición blanca, se equilibró la posesión y Messi demostró que su estado de forma es como el de un perro a la sombra en agosto. Por lo demás, llegamos al descanso con un centro de Cristiano, que Piqué dejó pasar con los brazos abiertos, no hay problema, todo controlado, y que Khedira casi manda a la red, pero remató al tobillo de Valdés, el balón rebotó en la mano de Adriano y ya tenían los blancos a quien cargarle el muerto, Undiano, el Chivo Expiatorio.

 Fíjense si la primera mitad fue mala que el primer córner del partido se botó en la segunda. Pero algo había cambiado, lo sacó el Madrid que poco a poco empezó a llevar peligro al área de Valdés. Entonces llegó el fútbol que había estado ausente toda la tarde y dio comienzo un intercambio de ataques y contraataques más propio del boxeo, en el que los de Ancelotti golpearon con peores intenciones, pero una cosa que tiene el Barça del Tata es la libertad para usar todos los recursos que se tengan a mano, y así desde la defensa se puso un balón a la espalda de las líneas blancas que Neymar remató espectacular tras la tragada de Varane, Don Carlo se cansó y metió a Illarra, empezaba el partido. Con la zaga azulgrana muy en plan caniche, Valdés sacó una mano abajo de puros reflejos a Cristiano, parada solo al alcance de los elegidos, era el empate, todos lo vimos, pero el de Hospitalet demostró que probablemente es el portero más en forma del mundo. El Madrid no se amilanó e insistió. Igualó la posesión y Undiano se proclamó como chivo expiatorio blanco a los ojos de todos, Mascherano, dogo argentino, en carga “reglamentaria”, hombro con hombro, mandó a Cristiano a la estratosfera con el tipo de Red Bull, muy pronto lo veremos en alguna guasa, en este país por wassap no es. El Madrid tiró de casta y no se rindió, olían el gol. Faltó poco para que Benzemá tuviera que pagar la portería pues casi la rompe reventando la escuadra, terminado el partido aún temblaban los palos. Pero si tras estas tres jugadas el Barça se te escapa vivo… 

Los del Tata espabilaron, o lo hacían o palmaban, porque el Madrid en cuanto fue reconocible con Illarra y Benzemá se hizo acreedor al empate o algo más. Pero esto es fútbol, y el Tata no se corta si tiene que meter a Song como pivote con Busquets (que llevaba todo el partido con amarilla), aunque el sacrificado fuera Iniesta. Cambio defensivo impensable en otras épocas y cayó el segundo en el setenta y ocho, de perro ciego. La mejor noticia para el Barça es que anoche fichó a un pedazo de delantero. Neymar la puso al hueco para la carrera del nueve y cuando Varane lo iba a superar se paró, fintó, se la preparó y vaselina perfecta a un portero de casi dos metros que andaba un tanto fuera de su sitio. Golazo. Incontestable. Tras una pretemporada de más de dos años Alexis Sánchez, el chileno, puso en pie al Camp Nou y a todos los culés del mundo, felicísima noticia. 

 Hasta el final poco más. Alves le sacó los colores a Cristiano pero remató flojo ante Diego López y el gol del Madrid. Llegó en el descuento, Jesé acortó distancias en un remate violento que pasó bajo Valdés, pero ya no inquietaba por la hora, sobre todo cuando los culés se llevaron la bola al córner a que el partido muriera, no sin antes ver un detallazo de Messi que anoche no se sumó a la fiesta. Clásico bonito solo en la segunda parte, emocionante por lo que se jugaban, seis puntos de diferencia y mucho que mejorar en ambas escuadras. Vimos dos versiones de Barcelona y Madrid muy grises, con luz y color solo a ráfagas, por lo que aún queda liga de sobra. A los que no vimos fue a Bale y Messi, toda la noche en plan chiguagua, era un partido perfecto para que el primero se justificara y el segundo demostrara su forma. Ná de ná. 

 Y luego ya se sabe, canutazos y ruedas de prensa. El mister blanco reclamaba los penaltis de Adriano y el del dogo argentino, al menos Cristiano se lo dijo a la cara a Undiano aludiendo a ciertos problemas de incontinencia no urinaria. Por su parte los culés pedían otro de Pepe a Cesc, además de la expulsión de Ramos por una entrada a Iniesta en la segunda parte cuando el cuatro blanco ya tenía la amarilla… lo dicho, excusas de mal pagador, balones fuera y menos asumir unos y otros que no estuvieron a la altura de la ocasión se escuchó de todo, y es que señores, el mejor amigo del hombre es el Chivo Expiatorio. 

FICHA TECNICA:

FC BARCELONA: Víctor Valdés; Alves, Piqué, Mascherano, Adriano; Busquets, Xavi, Iniesta (Song, m.77), Cesc (Alexis, m.70), Messi y Neymar (Pedro, m.84). 

REAL MADRID: Diego López; Carvajal, Pepe, Varane, Marcelo; Khedira, Sergio Ramos (Illaramendi. m.56), Modric; Di Maria (Jesé, m.76), Cristiano Ronaldo y Bale (Benzema, m.61). 

INCIDENCIAS: Asistieron al encuentro 98.761 espectadores, en partido correspondiente a la décima jornada de la Liga BBVA disputado en el Camp Nou. 

GOLES: 1-0, m.19: Neymar. 2-0, m.78: Alexis. 2-1, m.91: Jesé.

Fdo. Antonio Porlán.

REAL MADRID 2 - JUVENTUS 1. AL CLÁSICO ENTRE DUDAS.

 

Chiellini, un amigo.

Caía la tarde en Madrid, y aunque no era domingo, por el barrio de chamartin paseaban las mocitas madrileñas; dicen que iban alegres y risueñas por que jugaba su "Madri". Se percibía en el ambiente aromas de choque grande, quizás sin las mariposas en el estomago del "tu o yo", pero con ansia de presenciar un partido de los llamados clásicos europeos. Decir Real Madrid - Juventus es hacer esbozar una sonrisa a cualquier madridista, una sonrisa cargada de recuerdos, es hacerle volver a vivir una noche para la historia, una noche que sacudió la polvorienta chaqueta del madridismo que llevaba ya la friolera de 32 años sin poderla airear y es que la otrora copa de Europa si era la verdadera copa de campeones, ahora es simple y llanamente un clin-clin caja disfrazado bajo el nombre de liga de campeones y yo me pregunto ¿campeones de que? en fin, negocio puro y duro... el caso es que al aficionado merengue se le acumulaban los años sin saborear ese trofeo del que tanto y tanto les habían hablado sus antepasados, esa copa que hace que su club sea lo que hoy en día es. 

Uno que nació dos días antes de que la sexta se hiciera un sitio en las vitrinas, pertenece a aquella generación que solo veía  las copas de Europa a través de un cristal, un cristal que separaba el pasado del presente y que te hacia sentir huérfano de sensaciones, aquellas que solo vive el que lo disfruta in situ y lo ve con sus propios ojos. Por eso aquella noche fue mágica para muchos madridistas que hoy ya son cuarentones, por un sueño que se hacia realidad y porque el equipo al que se conseguía batir en aquella final de Amsterdan era ni más ni menos que la vieja señora, aquella Juve de los: Peruzzi; Torricelli, Montero, Zidane, Davids, Deschamps, Del Piero, Inzaghi e incluso su actual entrenador Conte, casi "na" al aparato que diría aquel. Sin duda el equipo transalpino es un grande, cuando uno ve esa equipación bianconeri enseguida identifica esos colores, son su seña de identidad, ahora, después de un viaje al averno vuelve al panorama internacional que es donde el club italiano necesita estar y donde el fútbol necesita que esté, la Vecchia Signora ha vuelto. Con ustedes, La Fidanzata d´Italia (la novia de Italia).

Por esas cosas del merchandising aparecía la Juve en el césped de chamartin con un aspecto muy gaditano, ese amarillo de sol y azul de mar nos tuvo a más de uno buscando a Mágico Gonzalez por el verde, lo más parecido que encontramos fue a Andrea Pirlo, que jugador, madre mía, es lo que trae consigo la mercadotecnia, lo que no se puede comprar con dinero se compra con más dinero aunque por el camino se nos quede el romanticismo a los pocos románticos que quedamos.

Echaba a rodar el balón en el coliseo blanco y apenas se llegaba al minuto dos cuando Iker tuvo que repeler el primer disparo del conjunto turinés. Apenas dos minutos más tarde llegaba el primer tanto de la noche que corría a cargo de quien si no, Cristiano, el de Madeira primero dispara y luego pregunta, no pierde el tiempo en pestañeos, Cristiano es así, en la celebración iban los errores del pasado Sábado, dejó el ambiente lleno de rabia, con él se llevó la conciencia tranquila. Era la primera vez que el portugués se enfrentaba a la Juve, por lo que evidentemente era uno de los pocos a los que no había marcado nunca, otra victima, otra cabeza que poner en el salón, otra presa que prueba su voracidad, otro objetivo cumplido, otro sueño roto, otra meta que buscar y otro sitio al que mirar en busca de una nueva hazaña.

El partido prometía pero al final resultó tener los dedos cruzados, el eterno viejo truco que de niños nos daba licencia para el incumplimiento, unos y otros se alternaban en busca de hacerse dueños del balón y fueron los de Conte los que se apoderaron de él, fue entonces cuando el Madrid empezó a sufrir, Andrea Pirlo campaba a sus anchas por la linea media, si a este jugador le das dos segundos para pensar le sobra uno, el fleresi (nació en Flero) es uno de esos jugadores que se les ve futbolista aun cuando andan por la calle, que fenómeno. Bajo su batuta comenzó a carburar el conjunto ayer amarillo, da gusto verle como domina el tempo, es un jugador de los que llena el escenario, es de esos que vive en la dificultad de una manera sencilla, como sin darse importancia, mientras otros corren por llegar a tiempo, a él el tiempo parece esperarle, el tiempo jamás tiene prisa, así es Pirlo, un autentico crack del deporte rey. Cierto es también que la función que desempeño anoche Fernando Llorente fue impagable, fue un desahogo constante para sus compañeros, el pamplonica recibía, aguantaba, esperaba y tocaba, será cuestión de tiempo el que se adapte al fútbol que propone su equipo, cuando lo consiga enamorará a los turineses, guapo ya es, y ser guapo en Italia es un paso de gigante hacia el éxito, si ya lo se, pero Gatusso es la excepción que confirma la regla, en Italia son guapos hasta los centrales.

Era cuestión de tiempo que llegara el gol juventino, cuando marcó el Navarro, en un balón suelto que había rechazo Iker como pudo, todo el que estaba viendo el partido comento al unisono "se veía venir" y es que, se veía venir. Los italianos eran dueños del balón, si, como lo leen, dueños de la posesión, por momentos parecía querer desertar del fútbol transalpino y cuentan que hasta el catenaccio se sintió traicionado por uno de los suyos, anoche y de amarillo parecía más Brasil que la "azzurra". Los anoche "giallo", jugaron una media hora de categoría y por medio se llevaron al Madrid, solo el orgullo blanco les hacia aguantar, el orden ya lo habían perdido y por momentos junto a él, la confianza.

No pintaban las cosas bien para los de Anccelotti, pero fue entonces cuando apareció Chiellini para cortar la soga al ahorcado, fue en un balón colgado al área al saque de una falta en el carril del diez, cometió un penalti sin querer... sin querer soltar a Sergio Ramos, que tuvo que dar tres palmadas en el suelo para que le soltara, Ipon para el pisano, lanzó Cristiano, imparable hasta para Buffon, era el 2-1. 

Nos fuimos al descanso en busca de resuello, aún sentíamos presión en la garganta y es que los de Conte habían dejado al Madrid con las miserias al aire, el marcador mentía y lo sabíamos, pero "ande yo caliente..." no obstante habíamos vivido una buena primera mitad, nos esperaban 45 minutos en el dentista pensó más de uno.

No habíamos tomado asiento aún cuando volvió a aparecer Chiellini para dejar al equipo en inferioridad por una supuesta agresión que no existió, el puso el arma y el arbitro apretó el gatillo, la bala hizo más daño a los locales que a los visitantes. Fue a partir de ahí cuando el equipo español empezó a mirar por el retrovisor lo que se le aproximaba, el clásico del sábado en la ciudad condal, error común entre los que mucho abarcan y al final poco aprietan. 

El equipo blanco se fue del partido por completo, los cambios que introdujo Carlo fueron vanos, ninguno aportó nada que no hubiera ya, quizás algo de Morata al que la ilusión y el jugar en el lugar de Karim le hacen parecer el yerno perfecto. Karim que marró un gol bajo palos de los que parecen imposible de fallar, cayó a plomo como vencido por el peso del escudo y es que le empieza a ensordecer esos silencios del Bernabeu que tanto le gustan a mi compañero Porlan. La entrada de Isco no cambio nada y la presencia de Bale fue testimonial. Lo del británico lo tengo asumido, háganme caso que hasta mediados de Enero o principios de Febrero no vamos a ver al Garet que la gente espera, solo cabe la paciencia y pensar que ha firmado para seis temporadas no para seis meses, por eso dicen que la paciencia es la madre de la ciencia.

No quiero pasar por alto el momento simpático de la noche. El protagonista Vidal, el dañado el césped, el perjudicado el tobillo del propio jugador bianconeri. El chileno pidió penalti al arbitro de una manera vehemente tras cometer un atentado contra la jardinería, en vez de meter su vergüenza en el agujero y taparla con el verde pasto, la risa fue generalizada, preparen los wassap para las fotos del ínclito objeto del "penalti".

Poco más que contar, si acaso una buena ocasión de Kedhira que se encontró dentro del área y delante de Buffon, el resultado lo imaginan ¿no? intento de vaselina, que osados son algunos, ¿imaginan un tractor por el carril izquierdo de la Castellana? pues eso, cosas antinaturales.

Lo dicho, mala segunda mitad del equipo capitalino que no supo abordar a un equipo en inferioridad y que acabó pidiendo la hora, la Juve hizo lo que pudo que quizás fue más de lo que alguno podía suponer, jugó la segunda parte con el orgullo de los campeones y por momentos superó a un equipo gris y que tenia la mente en coger el puente aéreo para afrontar un nuevo clásico.

El sábado se enfrentaran los dos transatlánticos del fútbol español, pero esta vez no se discute quien llega mejor, se mide quien llega menos mal, y es que los dos equipos viven en cierto modo vidas paralelas, por unas cuestiones unos y por otras los otros, los dos llegan sujetos por sus dos máximas estrellas, uno Cristiano, el otro Messi y ambos tienen un socio que les ayuda en sus labores, aquel a Di Maria, este a Neymar, dos equipos que no llegan en su mejor momento, esto suele ser sinónimo de partidazo a la vista, a un partidazo al que ambos llegan cargados de dudas, que el fútbol las disipe.

FICHA TÉCNICA.

REAL MADRID: Casillas, Arbeloa, Pepe, Ramos, Marcelo, Khedira, Illarramendi (Isco, min.74), Modric, Di María (Morata, min.78), Ronaldo y Benzema (Bale, min.66).

JUVENTUS: Buffon, Cáceres, Chiellini, Barzagli, Ogbonna (Giovinco, min.67), Pogba, Pirlo (Asamoah, min.58), Vidal, Marchisio, Tévez y Llorente (Bonucci, min.49) .

GOLES:

   1-0, Min.4: Cristiano Ronaldo.

   1-1, Min.21: Llorente.

   2-1, Min.28: Cristiano Ronaldo, de penalti.

ÁRBITRO: Manuel Gräfe (ALE). Amonestó a Illarramendi (min.18), Modric (min.77) y Ramos (min.88) por parte del Real Madrid; y a Vidal (min.28) y Cáceres (min78) por parte de la Juventus. Expulsó por roja directa a Chiellini (min.47) por parte de la Juventus.

 ESTADIO: Santiago Bernabéu.

Fdo: Carlos el pelijas.

AC MILAN 1 - FC BARCELONA 1. VENI, VIDI, PAREGGIO.

   

Messi tuvo que ser.

Llegué, vi y empate. Así se puede resumir en tres palabras el partido disputado esta noche en la tercera jornada de la Champions entre el A.C. Milán y un F.C. Barcelona que volvió al que se podía definir como su segunda casa, el estadio de San Siro, al ser este el segundo estadio en el que ha disputado más encuentros de la Champions en los últimos años, tras el Camp Nou, debido a la caprichosa fortuna en forma de sorteo de grupos o de cruces en eliminatorias antes los equipos de la ciudad de Milán. 

Ciudad de la moda, el Barça se presentaba en el templo milanés que bajo el lema del Nessun Dorma (Nadie Duerma) de Puccini intentaba llevar en volandas a su equipo inyectándole, con su gran apoyo desde el graderío, un extra de motivación que en los primeros minutos logró sorprender a un conjunto blaugrana adormilado que se veía superado por un Milán en el que sobresalía un Kaká que parecía vivir una segunda juventud tras haberse enfundado ese traje milanista que antaño le había elevado a los altares del fútbol mundial. 

Con todos esos alicientes el Milán salió en tromba, jugando a la contra, y ejerciendo una presión asfixiante formando con un 4-5-1 con dos líneas muy juntas y con un medio del campo formado por un trivote muy físico-defensivo con De Jong, Montolivo y Muntari y en el que Kaká, escorado a la izquierda hacía un sobresfuerzo físico ayudando en las coberturas al lateral zurdo Constant para tapar las subidas de Dani Alves y Birsa hacía lo propio en la derecha auxiliando a Abate para cerrarle bien los espacios a Neymar. 

Ante eso el Barça tocaba a velocidad lenta sin encontrar espacios para poder desbordar por los extremos o encontrar algún hueco buscando los pasillos interiores intentando encontrar las diagonales de Alexis Sánchez o Messi. Sin duda era el partido soñado por un Milán que, al igual que muchos otros equipos, se tenía bien estudiado el estilo de un Barça que antaño deslumbraba pero al que hoy en día parece que le tienen cogida la medida todos los equipos ganando actualmente más sus partidos por pegada, gracias a los destellos de calidad que atesoran sus jugadores, que por ese fútbol vistoso y desbordante que antaño destilaba y con el que enamoraba a aficionados e hipnotizaba a rivales. 

Con ambos equipos mostrando sus estilos tan diferenciados podríamos decir que el partido podría equipararse a la ópera de La Traviata por estar dividido en tres fases bien diferenciadas, a saber: 

- Una primera media hora en la que el Milán sorprendió al Barcelona y en la que fruto de ello aprovechó un error entre Mascherano y Piqué que dio pié a que Robinho y Kaká hiciesen, en las cercanías del área, una rápida pared entre ambos exmadridistas para que el exjugador del Santos y Manchester City entrase como un puñal en el área anticipándose a Piqué y a la ayuda de Busquets para batir a Victor Valdés. Lejos de espolear al conjunto azulgrana, hiriéndole en su orgullo, ese gol valió al conjunto italiano para convencerse aún más del planteamiento de su entrenador Allegri maniatando a su rival. 

El Barça seguía dominando la posesión pero parecía más un equipo inerte que vivo y cuyo único mérito fue saber aprovechar en el minuto 23 un regalo del Milán que, con un fallo garrafal en la salida del balón, le devolvió el favor al conjunto culé dando pié a una rápida recuperación de Iniesta en la medular que tras ganar metros le cedió el balón a un Messi para que este último, con suspense y tras recorte, lograse batir a Amelia firmando las tablas en el marcador en la primera llegada a puerta del equipo. Sin duda había sido demasiado premio para un conjunto azulgrana que no había demostrado gran cosa hasta entonces. Sin embargo la alegría estuvo a punto de durar bien poco si en el minuto 27 Mexes hubiese marcado tras rematar de cabeza, en posición franca y en el segundo palo, un córner en el que Valdés había hecho una media salida dejando vendida la portería, enviando fuera por poco su testarazo. 

- En la segunda media hora, comprendida entre los últimos 15 min. de la primera mitad y los primeros 15 de la segunda, el partido se abrió un poco más motivado por la gran confianza de un Milán que estaba viniéndose arriba al comprobar el peligro que estaba ocasionando a la contra y con un Barça que parecía querer despertar intentando mostrar sus galones antes los sustos propiciados por el conjunto italiano. Fue la media hora de las ocasiones más claras para ambos conjuntos. 

Minuto 30: Buen centro de Alves para Messi, que conectó un disparo peligroso que se marchó a córner tras tocar en Zapata. 
Minuto 31: Arrancada de Neymar desde la izquierda yéndose hacia el centro para lanzar un disparo que se marchó a la derecha cerca de la portería de Amelia. 
Minuto 37: Alexis, internándose en profundidad, remata de volea mansamente a las manos de Amelia una milimétrica asistencia de Xavi. 
 Minuto 43: Messi recibió de Busquets en el interior del área y cuando ya se cantaba el 1-2 apareció Zapata para obstaculizar su disparo. 
Minuto 44: Neymar desde el interior del área escorado a la izquierda está a punto de marcar el 1-2 sacándose un latigazo marchándose su remate cruzado fuera a un palmo del poste izquierdo de Amelia. 

Sin duda los 15 últimos minutos de la primera parte fueron los mejores del conjunto azulgrana que jugando un fútbol muy previsible había tenido sus mejores ocasiones ante un conjunto italiano que se había descompuesto un poco en su organización defensiva. 

Tras el descanso el Milán volvía a salir como en la primera parte, apretando al Barça, y fruto de ello en el minuto 51 Robinho perdonó al Barça en una jugada en la que solo ante Valdés no logró contactar con el balón cuando solamente tenía que tocarlo para marcar. 
En el minuto 53, el Barça respondería con Alves que se la deja con el pecho a Messi que progresa y asiste a Xavi para que el de Terrassa, ya en la frontal, meta un balón interior para Iniesta que, con todo a favor, se topa con Amelia. 
En el 54 se va fuera un disparo de Messi tras una magnífica asistencia de tacón de Iniesta en el balcón del área. 
En el 56 Kaká no vio a un Robinho que estaba absolutamente solo en la izquierda en una posición muy propicia para marcar el 2-1 para los italianos. 

- Tercera media hora: El partido se convierte en un correcalles y en ese período los entrenadores de ambos bandos movieron sus banquillos para intentar dar más profundidad y mordiente a sus equipos. En esos minutos de fútbol travado lo único a destacar fueron las siguientes ocasiones:

Minuto 67: Disparo lejano y potente de Constant que estuvo a punto de desviar Balotelli para convertirlo en el 2-1. 
Minuto 69: Pase picado de Messi a Adriano, que se desmarcó a la perfección por el carril izquierdo. El brasileño controla bien pero su disparo en boca de gol, y algo escorado, se marcha fuera al rematar mal tras botarle el balón y con Amelia encima cerrándole bien los espacios. 
Minuto 81: Error de Busquets que arriesgando mucho en el pase la perdió ante un Balotelli que, molestado por Mascherano, disparó tímido ante Valdés perdonando el 2-1. 

A partir de ahí el partido no tendría nada más a destacar muriendo así un encuentro que dejo muchas dudas en el conjunto barcelonista, tanto a nivel defensivo por su fragilidad como a nivel ofensivo por su falta de ideas con su fútbol lento y previsible, ante un conjunto milanista que dista mucho del grandioso conjunto italiano que antaño intimidaba en Europa en sus mejores años donde lucían jugadores de la talla de Marco Van Basten, George Weah o Andrei Schevchenko bien acompañados por grandes figuras nacionales como los míticos Maldini o Baresi entre otros. 

Sin duda alguna lo mejor del encuentro fue el resultado para un equipo que mucho tendrá que mejorar si quiere encarar con suficientes garantías el duelo de altos vuelos que le espera esta semana en liga recibiendo a un R. Madrid muy necesitado de vencer en el feudo barcelonista a fin de comprimir aún más la clasificación respecto a sus máximos rivales en la disputa por el título de liga. 

FICHA TÉCNICA:

ALINEACIONES: 

AC MILAN:  Amelia; Abate, Zapata, Mexés, Constant; De Jong, Montolivo; Birsa (Poli, min. 80), Kaká (Emanuelson, min. 71), Muntari y Robinho (Balotelli, min. 64). 

FC BARCELONA: Víctor Valdés; Dani Alves, Piqué, Mascherano, Adriano; Sergio Busquets, Xavi, Iniesta; Alexis (Cesc, min. 74), Messi y Neymar (Pedro, min. 80). 

ÁRBITRO: Felix Brych (Alemania), asistido en las bandas por Mark Borsch y Stefan Lupp y junto a las porterías por Tobias Welz y Guido Winkmann. Mostró tarjetas amarillas a Montolivo (min. 40) y Muntari (min. 77) por parte italiana y a Alexis (min. 32) y Cesc (min. 80) por el Barça.

ESTADIO: San Siro: 78.000 espectadores. 17 grados de temperatura en noche cerrada.

Fdo: Jesús Martinez.

C AT OSASUNA 0 - FC BARCELONA 0. ESTA CRÓNICA NO ES MÍA.

 

Puyol volvió a ser titular 224 dias despues.

Les ruego me perdonen pero estoy carente de toda inspiración, vacío por completo. Visto lo visto en el partido no se me ocurre nada que contarles, por eso he pensado en echar mano del talento de mis compañeros para intentar narrar algo que se pueda leer, porque si les contara lo que vimos sobre el verde, esta crónica se limitaría al resultado y punto.

 En este “horario de merienda, tarde de mantel a cuadros y tartera (Pelijas, R. Madrid Levante)” se citaba el Barça con la historia, pero no se encontró con ella. El partido de los records se podría definir como un fenomenal “Tostonen”, tal como Diego J Cerrato nos contó en Finlandia España, y las expectativas, las marcas y buena parte del colchón que se acumulaba sobre los blancos, se evaporaron. “La siesta nos costó la tarde (Diego J Cerrato, España-Finlandia)” ya que no se consiguió igualar al Madrid yeyé de las nueve de nueve, y además se truncó la racha goleadora más larga de toda Europa, sesenta y cuatro partidos consecutivos marcando, desde enero de 2012, casi nada al aparato, ahora hay que volver a empezar. 

“Discurrió el primer cuarto de hora de los de irse a contar granos de arena al desierto (Diego J Cerrato, España- Uruguay)”, solo destacar que Messi partía desde el banquillo y que el polo verde manzana del Tata Martino ya es un clásico de nuestra liga. El partido era desagradable, como el escaparate de una ortopedia, solo nos gustaba volver a ver la melena del tarzán Puyol en el centro de la defensa, el capi ha vuelto, enhorabuena. Pero poco más que decir, la primera parte fue “como si de una partida de Risk se tratara (…) y aunque no es día de señalar a nadie hay ciertas piezas (…) que no encajaron en el tablero (Tony SPK, R. Madrid- Atlético)”, vamos que en los primeros cuarenta y cinco solo vimos a Cesc tratando de imitar a Maradona en “la mano de Dios”, lo que le costó la amarilla, y una sola ocasión clara, de Bartra a balón parado a la salida de un córner, muy poca cosa para un Barcelona que se podría haber acomodado el clásico y que llevaba más de año y medio mojando en cada partido. 

 “Saltaban a la segunda parte sin cambios aunque el juego los pedía a gritos (Óscar Martínez, Georgia - España)”. Pero en el primer cuarto de hora los del Tata nos dieron algo que echarnos a la boca. “El Barcelona era amo de la posesión con el tridente Busquets – Xavi – Iniesta controlando el tempo del partido, pero moría en la orilla del área rival (Jesús Martínez, Celtic- Barça)”. Llegaron un par de ocasiones muy claras que hubieran sentenciado, grandes jugadas nacidas de Neymar, que se ha reencontrado con su peluquero, el manchego de oro o el falso nueve, a Cesc me refiero, sin embargo “perlas sueltas no hacen Joyería (Pelijas, R. Madrid- Copenhague)” y pasado ese rato de fútbol culé marca de la casa, volvimos a las andadas. “El partido era infumable, era como pasear sin tener nada que mirar, vamos que hay bailes con familiares que son más divertidos (Pelijas, Zaragoza- R.Madrid)”. De pronto un rayo de esperanza iluminó los corazones azulgranas, Messi saltaba al campo… y ya no volví a anotar nada en mi libreta, se acabó.

 “Victoria moral de Osasuna (Óscar Martínez, España – Francia)”, claro que lo de Osasuna lo cambio para usar su frase, pero es que no se me ocurre mejor definición al ver al público del Sadar celebrar el empate como si fuera el pase a una final de Champions. Y en la grada azulgrana “silencios que gritan (Pelijas, R. Madrid – Copenhague)”. No hay tela que cortar. Lo cierto es que el encuentro apestaba a tropiezo desde el primer minuto, con un Barça al que le faltó de todo menos tiempo, no se les vio intensidad, compromiso, ideas, entrega, dio la sensación de que a Osasuna le bastó con plantear una defensa ordenadita y aguerrida, ni siquiera al límite, es como si supieran por donde los iban a buscar y ahí esperaron emboscados. Sin embargo su sacrificio fue que no vimos de qué color llevaba la camiseta Valdés, pero a la parroquia local no le importó, eran felices. El año pasado leímos a nuestro Pelijas, ante un mal partido del Madrid, que por una vez merecía la pena ser ciego en Granada, pues ayer en Pamplona tres cuartos de lo mismo. Por cierto, ¿tienen o no tienen talento mis compañeros? 

FICHA TECNICA:

 C.AT. OSASUNA: Andrés Fernández; Marc Bertrán, Loties, Arribas, Damià (c); Silva, Lolo, Sisi (Onwu, 5'), De las Cuevas (Oier, 85'); Roberto Torres y Oriol Riera (Puñal, 67'). 

F.C. BARCELONA: Valdés; Montoya, Puyol (c), Bartra, Adriano; Busquets, Xavi (Messi, 67'), Iniesta; Pedro (Tello, 75'), Cesc y Neymar. 

ÁRBITRO: Pedro Jesús Pérez Montero. Mostró tarjetas a Cesc (Min. 32) por jugar el balón con la mano; a Bertrán (Min. 77) por una falta sobre Neymar; a Adriano (Min. 83) por una patada sobre Puñal; a Torres (Min. 89) por una falta sobre Cesc; y a Onwu (Min. 90) por agarrar a Busquets.

Fdo: Antonio Porlán Arcos.

REAL MADRID 2 - MÁLAGA CF 0. LAS CRÓNICAS DE HERNIA.

Cristiano no tuvo su día y así se disculpó ante el madridismo.

Nunca una semana de partidos internacionales había dado tanto de sí, en lo que a salidas, anuncios de fichajes, ultimatums y lesiones de espalda se refiere, teniendo en cuenta que se jugaba la novena jornada de liga; De las palabras de Iker Casillas sobre su futuro en el club a la oscura lesión de Gareth Bale, pasando por el fichaje de Falcao por el Real Madrid, ya confirmado por los medios cercanos. Los encuentros de selecciones "ayudan" a los entrenadores a tirar de fondo de armario y rotar, dando descanso a los tocados física y anímicamente, en el caso de Ancelotti poniendo dos nombres el "candelabro" (que diría la Mazagatoa) como los de Alvaro Morata y Gareth Bale, el primero con la oportunidad ganada por derecho, de entrar en un once por el tocado Benzema y el segundo, con las expectativas de constatar la buena salud defendida por los servicios médicos del club y su entrenador, obligado a sumar minutos si se quiere ver al Galés en el próximo clásico. 

Con las evidentes dudas y continuas pruebas, Carleto también reafirmaba algunas posiciones y mostraba claramente la confianza total en Isco, el crack exmalaguista y sobre todo y más anti popular, el apoyo a Khedira, que sigue jugando pese al escarnio periodístico contra el internacional germano, ayer por segunda vez en la temporada junto a Illarra como ejes del centro del campo; Julio César Iglesias diría que "Hoy, juegan los malos". 

Bernardo Schuster, en su regreso al Bernabéu, buscaba sacar tajada del momento de inestabilidad que aparentemente vive su anterior equipo, con un resultado positivo o incluso dar la campanada y vencer en la que fue su casa, misión harto difícil. 

La primera parte no arrojaba muchas sorpresas respecto a los partidos anteriores, el Real Madrid quiere tocar sin perder su carácter vertical y el equipo contrario, sin echarse atrás excesivamente, intenta no perder su sitio, ayer con un multiusos como Camacho en tareas varias y Eliseu, Portillo y el goleador El Hamdaoui para aprovechar cualquier error defensivo de los blancos, no poco habituales en los últimos tiempos. 

Como siempre, el "fuera de concurso" Ronaldo no esperaba a nadie y en el minuto nueve, probó la consistencia del larguero con un trallazo que bien mereció el gol; La lluvia se unía al espectáculo y poco más daban de sí los primeros 45 minutos, una buena imagen de los blancos con alto porcentaje de dominio pero siempre buscando el camino rápido, alguna ocasión más de Cristiano y el destacado estreno como titular de Morata, que marcó un gol anulado correctamente por fuera de juego y un remate de cabeza, que Caballero con una mano inverosímil, se habría encargado de evitar, si el árbitro no lo hubiera anulado por fuera de juego, nuevamente correcto. 

Ayza Gamez se guardaba el silbato tras ordenar el inicio del segundo tiempo, cuando Di María centró desde su casa en la banda derecha y el efecto, junto al intento de remate de CR7, confundían al portero argentino que se estiraba sin poder evitar el gol; El dominio y la insistencia premiaban a los blancos, que siguen evidenciando momentos de inoperancia cara a gol, lo que en liga puede tratarse pero en Champions seria mortal de necesidad, unida a la gran actuación de Wilfredo Caballero, que ayer lo paró casi todo y fue el mejor jugador del partido. 

El juego de control del equipo de "los 16 de Carlo", reforzaba otra apuesta del entrenador italiano y Khedira, en su posición ofensiva natural, generaba varias jugadas de ataque, dos paredes complicadas y recuperaba balones con el apoyo de Illarra, en la posición que ocupa normalmente el germano, donde no se encuentra cómodo, habrá que esperar a que tenga un mal día para acumular portadas y horas de radio pidiendo el exilio del de Sttutgart. El estadio al completo esperaba otro gol, y/o la salida de Gareth Bale; Si el primero en salir fue Isco por Modric, con el detalle en forma de aplausos de la afición andaluza desplazada a Madrid y de la actual, Clement instruía en la banda al jugador Galés para que ingresara en el 75 por un destacado y cansado Morata, que se llevaba la ovación de su público y le demostró a algunos expertos, que el esfuerzo sin premio también es útil y valorable, pero ante todo en el Madrid, es obligatorio. Los cambios, sobre todo tardíos en el Málaga, no produjeron alteración en la parálisis del Málaga salvo alguna arrancada de Anderson, pero el 1-0 en el primer minuto había dilapidado las pocas esperanzas de Schuster de pescar en su antiguo río. 

El encuentro agonizaba, con paradas y más paradas de Caballero, que desquiciaban a Cristiano Ronaldo y lo hubiera hecho con cualquier bicho rematador; Pero si el Málaga había llegado una sola vez con cierto peligro al marco de Diego López, no había sentencia firme y se percibía intranquilidad hasta que en el 90, Bale protagonizaba una galopada con Weligton, que acababa con una caída dentro del área y Ayza Gámez pitaba penalty, al menos dudoso, pero sí parece que hubo contacto; Ronaldo se redimió y batió a su antihéroe en el día de ayer, "celebrándolo" con un estridente perdón a la afición, por las múltiples ocasiones falladas, a ver si esos que tildan de tribunero a Di María se atreven a hacerlo con la bestia lusa. 

Tres puntos que, conocidos posteriores resultados de los líderes de la liga, refuerzan el importante envite en Turín, recortando 2 y 3 puntos en la pelea por la cabeza de la clasificación. 

FICHA TECNICA:

REAL MADRID: Diego López, Carvajal, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo, Illarramendi, Khedira, Di María (Jesé 80) Isco (Modric 72') Cristiano y Morata (Bale 75'). 
Suplentes: Casillas, Bale, Casemiro, Arbeloa, Nacho, Modric y Jesé. 

MALAGA CF: Willy, Gámez, Weligton, Antunes (Darder 76) Camacho, El Hamdaoui, Portillo (Santa Cruz 76) Tissone, Eliseu, Sergio Sánchez y Samuel (Anderson 69'). 
Suplentes: Carlos Kameni, Roberto Chen, Duda, Pedro Morales, Sergi Darder, Bobley Anderson, Roque Santa Cruz 

ARBITRO: Aiza Gámez Amarillas: Antúnes (11') S.Sanchez (78') Eliseu (81') Weligton (82') Goles: Di maria (46') Cristiano (90', P.) 

INCIDENCIAS: 19-10-2013 / 9 jornada de la liga BBVA Estadio Santiago Bernabéu: 72000 espectadores Incidencias: El equipo de baloncesto ofreció la copa de la liga a su afición y se lucieron brazaletes rosas por el día mundial del cáncer de mama. 

P.D: Quiero incluir en esta crónica mi recuerdo por la deportista María de Villota. 

Fdo.Toni SPK

ESPAÑA 2 - GEORGIA O. GEORGIA ON MY MIND.

El 6 y el 8 vivieron su gran noche.

Queridos amigos: cuando Hoagy Carmichael compuso para Ray Charles en 1930 la maravillosa balada Georgia on my mind no pensaba en el país al que acabamos de apabullar futbolísticamente, pero tampoco pensaba en el estado americano que adoptó años mas tarde dicha melodía como canción oficial del sureño estado norteamericano. 

Don Vicente Del Bosque tampoco pensaba en ést Georgia, ni tampoco en la estadounidense, sino en el aburrido y cansino debate mediático de la portería. Con su flema acostumbrada el marqués tomó su decisión y jugó Casillas, tal y como lo tenía en su mind, como Carmichael tenía a su hermana Georgia y no a la república ex-soviética. 

La Georgia que nos atañe hoy es una jovencísima federación (1991) que pese a su ínfima calidad nos los puso de corbata en Tblisi el día del postrero gol de Soldado, cabo primero aquella noche. Hoy la historia se escribió con renglones diferentes: La revolución estaba en la mind del técnico salmantino que se inventó un once inicial con sorpresas varias: el capitán general en la meta, debut de Moreno en el lateral izquierdo y Juanfran sentando al ínclito Arbeloa, bandas abiertas con Pedrito y Navas pegados a la cal y un nueve, nueve, de los de campo de tierra, ni falso ni mentiroso; Negredo, que hizo más en este partido que Torres en el periodo comprendido desde su gol a Alemania en el Prater vienés, hasta nuestros dias. Una actualización en toda regla, como la de las aplicaciones de los móviles smartphones; actualización disponible. 

Presentadas las credenciales sobre el tapete del Carlos Belmonte comenzó el Iniesta,s day. Jugamos para match point y disponemos del servicio. Arrancamos con un ace, el tiki taka se cambió por el "a mí Sabino que los arrollo" y en los primeros minutos solo echamos de menos un cañoncito pum que nos rompiera la pelota desde fuera del área. En el minuto 20 llegó un momento mágico del partido, cuando Alvaro Negredo inventó una espectacular chilena que sino es por el meta georgiano hubiera sido el gol de la fase de clasificación del mundial. El mismo Álvaro y tras genial pared de Iniesta y Pedrito y a pase del manchego materializó un golazo de bandera que abrió la lata y puso sello al pasaporte para Fortaleza, ¿quien se acordaba ahora de Diego Costa?. Otro momento del partido fue cuando en el minuto 28 Casillas calló por enésima vez estériles debates con un paradón en ese momento clave en que hace falta una mano de santo. Pasada la primera media hora perdí la cuenta de los corners a favor y vi en Busquets a ese Il Metrónomo Albertini de ese super Milano que todos tenemos en la cabeza. 

Al descanso y con 7 ocasiones claras de gol la clasificación ya era un hecho. En el minuto 67 Mata sustituyó a Pedrito y revolucionó el partido a su manera, de hecho colocó el 2-0 en el marcador a los tres minutos de saltar el terreno de juego, si bien es verdad que tras un posible rebote en las manos de Piqué. Cuando en el 65 Koke salió por Xavi el partido se cerró definitivamente y lo único que esperamos fue la retirda del príncipe Iniesta para ser ovacionado espectacularmente por sus paisanos y dar la alternativa al principito Isco, que dejó detalles de la calidad que promete. Gran partido de España, en resumen, una España "diferente" y que nos lleva al décimo campeonato del mundo consecutivo (que se dice pronto), siempre quedará en esta noche GEORGIA IN MY MIND.

FICHA TÉCNICA.

RESULTADO: ESPAÑA, 2 - GEORGIA, 0. (1-0, al descanso).

ALINEACIONES:

ESPAÑA: Casillas; Juanfran, Ramos, Piqué, Alberto Moreno; Busquets, Xavi (Koke, min.66), Iniesta (Isco, min.81); Navas, Pedro (Mata, min.58) y Negredo.

GEORGIA: Kvaskhvadze; Lobjanidze, Grigalava (Avto, min.70), Kashia, Amisulashvili, Khubitia (Khmladaze, min.76), Kankava, Kobakhidze, Gelashvili (Modebadze, min.87), Ananidze y Okriashvili.

GOLES:

1 - 0, min.25, Negredo.

2 - 0, min.60, Mata.

ÁRBITRO: Florian Meyer (ALE). Amonestó a Khubitia (min.55) en Georgia.

ESTADIO: Carlos Belmonte. 18.000 espectadores.

Fdo. Diego J. Cerrato.

UNA ESTRELLA SOBRE RUEDAS.

 

El asfalto fue su hábitat.

En todos los ámbitos de la vida, hacerte un hueco en el que destacar es una tarea complicada, trabajo y lucha son ingredientes necesarios para poder conseguir cualquier objetivo que nos propongamos. Pero por desgracia, y ya en el siglo XXI, el ser mujer en un mundo de hombres todavía se hace complicado, hacerse un hueco sin parecer un bicho raro sumado al apellido de papá te suele cerrar más puertas de las que se abren. Aún así María supo hacer con ello un cocktail perfecto para alcanzar sus sueños. Esos sueños que María de Villota vio cumplidos en 1996 donde inició su carrera en el mundo del motor en un circuito de kart, de la mano de su hermano Emilio de Villota Jr. 

Desde pequeña vivió siempre con gran pasión todo lo relacionado con el automovilismo, su padre, ex piloto de Fórmula 1, Emilio de Villota, intentó con otros deportes hacer que María desistiera de su empeño de poder pilotar un monoplaza pero ella era de ideas fijas y cualquier detalle por pequeño que fuera que tuviera que ver los coches para María era como un regalo. Debutó en el año 2000 en la Fórmula Castrol en la categoría de monoplazas gracias a Movistar, luego competiría en el Campeonato de España de Fórmula 3, de la mano de su padre. En 2005 se centró en los turismos, compitiendo en Ferrari Challegne y el Maserati Trofeo. Quedó tercera en la ADAC en 2007, volviendo a los monoplazas en 2008, y hasta el 2011 representó al Atlético de Madrid en la Superleague Fórmula. Fue en ese mismo año cuando firmó con Renault F1 Team, pero sólo para representarlos en algunos eventos. Posteriormente en el 2012 María fue probadora del equipo ruso Marussia, con plaza en el equipo aunque sin la licencia para poder competir en la F1 como piloto, aunque sí pudo correr una vez con un monoplaza en Valencia por enfermedad de Timo Glock. 

Sin duda alguna ese año 2012 fue el peor en la carrera de María, un gravísimo accidente en el aeródromo de Duxford (Reino Unido) donde su equipo realizaba pruebas aerodinámicas, su vida corrió peligro, varias intervenciones donde consiguieron que aminorara la gravedad de la piloto. Perdió el ojo derecho lo que hizo que la piloto española no volviera a participar en la competición. 

Reapareció ese mismo año el 10 de Octubre, lo hizo para la prensa escrita en la revista Hola y un día después dio una rueda de prensa explicando punto por punto su recuperación, como se encontraba, dejó claro que estaba deseando volver a su pasión y agradeció todo el cariño tanto de la gente del deporte como de esa gente totalmente anónima que la admiraba y la quería. 

En Marzo del 2013 María sería la encargada de la Categoría de Monoplazas de la Comisión de Pilotos de la FIA, junto a Karun Chandhok y Nigel Mansell. Sin duda su vida siempre ha estado unida al mundo del motor, oliendo a gasolina, su gran pasión como fuera la de su padre del cual siguió sus pasos, tuvo su ayuda y consiguió ser un gran ejemplo para todas las mujeres deportistas pero en especial para todas las deportistas del mundo del motor, que en ella veían un ejemplo de superación, de saber que los sueños si se persiguen y se luchan por ellos se pueden conseguir. Ella siempre reivindicó que tenía que haber más representación femenina en los deportes del Motor. 

Sus récords personales la hacen ser única y primera en este deporte: Única mujer subcampeona de España en una competición nacional de monoplazas. Primera mujer en participar en el campeonato de WTCC.11. Primera mujer en participar en la Superleague Formula. Primera mujer española en participar en las 24 Horas de Daytona.12 Primera mujer en hacer la pole en el campeonato Ferrari Challenge. 

Siempre lucio su parche con orgullo.

  Nos dejó una mujer que siempre lució una preciosa sonrisa por malo que fueran los tiempos, que consiguió sus sueños, que hizo de su gran pasión su profesión, una profesión en la que a partir de ahora quedará un hueco imposible de volver llenar, ahora su estrella nos acompañará siempre brillando desde lo más alto del firmamento, con ella se nos va un parche con estilo, hizo de algo desgraciado una tendencia en la moda, hasta para eso arriesgo como lo hacia en cada curva, hoy ese parche se nos va con una INMENSA SONRISA, la sonrisa de Maria de Villota.

¡¡ Hasta siempre María!!

Fdo: Merche Mateos.

ESPAÑA 2 - BIELORRUSIA 1. ENSAIMADA BIELORRUSA.

 

Así marcó Negredo.

Se nos antojaba una Ensaimada Bielorrusa para cenar. Un trámite rápido para poner pie y medio en Brasil. 

Saltaba de inicio la Roja con el mejor Valdés de todos los tiempos en la portería, justicia poética para el catalán ante el “Moufenestrado” y “Ancelottisado” capitán español. Sumándose al debate de la portería, Del Bosque no quería ser menos, con esa fiebre de entrenador que a todos ellos alguna vez les entra, agregaba al debate de la delantera a un debutante Michu en la punta. El mal césped de Son Moix no se interponía en los primeros minutos a las señas de identidad de nuestra Gloriosa España, posesiones largas con toque y más toque. Ante la suplencia de Casillas, el capitán del barco no era otro que el maestro de ceremonias Xavi Hernández, al cual las rotaciones impuestas en el feudo blaugrana por el Tata Martino, le darán el descanso del guerrero. Ese Guerrero sin el que la Roja no sabe luchar. Cuando comanda el Barco, no queda otra que llegar a buen puerto. 

Pasaban los minutos, la posesión venia de la mano, o más bien de los pies, de Silva, Cesc y por supuesto Xavi. Haciendo honor a su nombre, el pedernal que quería poner la chispa incendiaria era el canario anteriormente conocido por Pedrito, digo anteriormente porque cada partido no hace más que demostrarnos una madurez digna de los más grandes, esos que dictan el resultado final de un partido. Como contagiados con este ímpetu se veía a los atacantes españoles envalentonados en los tiros a puerta, otrora gran problema en esta nuestra Roja. Todo pintaba bien, los bielorrusos eran meros espectadores de lo que parecía un entrenamiento en vez de un partido crucial en la clasificación para el Mundial. Quizá por eso la selección española se fue diluyendo hasta terminar la primera parte. 

Viendo el Marques que hacía falta una revolución para encarrilar la segunda parte y por consiguiente el partido, se dejó llevar por esa fiebre que le había entrado en los prolegómenos del partido, y se inventó una rocambolesca defensa de tres, provocada por la salida de Iniesta al campo, que sustituía a Monreal, y provocaba una remodelación ofensiva. En esa remodelación remataba su debut en el 56´ un Michu que se había pasado todo lo que iba de juego buscando su sitio, debut discreto del asturiano, al que Del Bosque otorgo demasiada responsabilidad quizá soñando tácticamente con un brasileño que aun esta por venir. Saltaba Negredo por Michu y no tardaba en crear una ocasión, mientras Pedro seguía buscando con ahínco el MVP del partido. 

Pero tenía que ser él, en la mejor versión de sí mismo, Don Xavi, quien por el minuto 60 recogía con guante de seda un balón bombeado por Piqué al punto de penalti para marcar de bolea el 1-0. Con el gol volvía la cordura al banquillo español, y la peligrosa defensa de tres en cualquier contragolpe rival, se tornaba en defensa de cuatro con Busquets retrasándose a la posición de central y Sergio Ramos dando un curso de lateral en los 30´minutos posteriores. Tanto fue así que después de un genial toque de tacón de Pedro, Ramos enseño a algún lateral habitual de esta selección como se debe centrar un balón para que lo remate a la red un delantero. Delantero que en ese minuto 77 era un tal Negredo, el cual en los pocos minutos que jugo demostró sus credenciales para el puesto con algunas pinceladas de buen fútbol y este segundo gol en el marcador. 

Clasificados para el Mundial, salvo improbable combinación (tiene la Roja que perder en Georgia y ganar Francia para cambiar posiciones) que España dejo morir el partido. Tanto se dejó llevar que en un despiste generalizado los Bielorrusos maquillaron el marcador en el último aliento del partido.

 Vayamos sacando el pasaporte señores, Brasil esta muy cerca. Pero que no se nos olvide, esto hay que mejorarlo.

FICHA TÉCNICA.

 RESULTADO: ESPAÑA, 2 - BIELORRUSIA, 1. (0-0, al descanso).

ALINEACIONES.

 ESPAÑA: Valdés, Arbeloa, Piqué, Sergio Ramos, Monreal (Iniesta, min.46); Busquets, Xavi, Silva, Pedro, Cesc (Koke, min.83) y Michu (Negredo, min.57).

 BIELORRUSIA: Gutor, Dragun, Martynovich (Kisliak, min.80), Putilo (Kornilenko, min.76), Balanovich, Tigorev, Verkhautsou, Bardachou, Rodionov (Krivets, min.54), Filipenka y Kalachev.

GOLES.

   1 - 0, min.60, Xavi.

   2 - 0, min.78, Negredo.

   2 - 1, min.89, Kornilenko.

 ÁRBITRO: Ivan Bebek (CRO). Amonestó con tarjeta amarilla a Martynovich (min.11), Kalachev (min.66) y Verkhautsou (min.93) en Bielorrusia; y a Piqué (min.33) en España

  

ESTADIO: Son Moix.

Fdo. Oscar Martinez.

 

LEVANTE UD 2 - REAL MADRID 3. EL ESPIRITU DE... MORATA.

 

Jesé y Morata, la cantera que viene.

Sábado 20:00, el minuto de silencio teñía de solemnidad, lo que en los últimos años se había convertido en un partido de alta tensión, con polémicas e igualdad entre dos equipos claramente desiguales y con Caparrós en el banquillo valenciano, no se esperaba menos; Los granotas necesitaban una victoria tranquilizadora después de 3 empates consecutivos y por su parte el Real Madrid, buscaba iniciar una racha de victorias que comenzó en Copenhague con la goleada en champions, mejorar el juego y hacer olvidar las dudas que envuelven al nuevo proyecto de Florentino, sobre todo desde lo ocurrido en Elche, pero ante todo no descolgarse de la cabeza de la liga. 

González González daba el pistoletazo de salida y los visitantes rodaban el balón en el renovado césped del Ciutat de Valencia, con un 4-3-3 reconocible, aunque ayer Modric y Khedira alternaban la salida del balón y mientras uno se acercaba a los centrales para recibir, el otro ganaba metros para ayudar en la transición, Isco era el vértice del triángulo como enlace con los tres titularísimos, hasta ahí, todo en orden; Coentrao marcaba su territorio y en el minuto 1, bien podía haber visto la tarjeta amarilla por un duro plantillazo a Rubén, que quedó en una falta mas. El tercero de la liga tomaba la iniciativa y el Levante esperaba bien ordenado, con un 4-5-1 en defensa, que Xumetra, Ivanschitz y Rubén García convertían en un 4-2-3-1 en contraataque, con Diawara (Babá) en punta de lanza; Pero el Levante no se agazapaba y presionaba en la salida tanto al alemán como al croata, una táctica que empieza a oficializarse contra el Real Madrid, pero que no es el fondo del problema sino la forma, ya que aunque te presionen en zona de creación, tus atacantes deben moverse y desorganizar a la defensa contraria, para que los mediocampistas y laterales tengan más opciones de sorprender, responsabilidad que Ronaldo, Di María y Benzemá no suelen asumir. 

Caparrós asignó la tarea de destrucción a Diop y a Simao, Ivanschitz se multiplicaba en las ayudas defensivas y de ataque, mientras que Rubén y Xumetra cerraban el paso a Arbeloa y Coentrao con Babá moviéndose entre los centrales blancos; Así transcurrieron los primeros 45 minutos, con 2 ocasiones claras de Di María y CR7 en las postrimerías y una tarjeta amarilla muy rigurosa a Khedira por un leve empujón a Xumetra. Se llegaba al final de la primera parte. 

Muchos le quitaban el envoltorio al bocadillo cuando recién iniciado el segundo tiempo, Varane fallaba por alto y dejaba a Diawara solo ante Diego López, pero el portero gallego muy atento despejaba el peligro. Parecía que los de Carleto habían salido claramente a por el partido, conocedores del riesgo de atacar con muchos jugadores y desguarnecerse atrás, pero sin más opciones. En el minuto 2, Diop volvía a meter el miedo en el cuerpo a los de Ancelotti, disparando por encima del marco de la portería madridista y solo 10 minutos después, un gran contragolpe del Levante tras un robo en su propia frontal, lanzaba a Xumetra llegando a zona de tres cuartos con la defensa merengue totalmente vendida, Ramos y Varane recularon y Khedira intentaba llegar al rescate, pero el jugador del Levante asistía de forma magistral a Babá, que remataba de primeras y batía al cancerbero de Paradela. Otro gol en contra y por debajo en el marcador, tónica muy peligrosa con tan solo 8 jornadas de liga y más, contra equipos inferiores. 

Sin tiempo para el postre, 4 minutos después, Di María servía un corner desde la izquierda y Ramos entraba con todo en el segundo palo, poniendo el empate en el marcador, gol que celebraba con rabia y que parecía devolver la tranquilidad a los suyos y reponer las expectativas de victoria. El entrenador blanco daba entrada a Marcelo por Coentrao en el 58, buscando mayor profundidad por su banda y a Morata en el 68 por un desacertado Isco; Con el Madrid volcado y la defensa en medio campo, El Zhar que había ingresado también en el 68 por un ovacionado Xumetra, controlaba hasta 3 veces dentro del área ante Ramos y marcaba raso a Diego López, un gol que adelantaba a los locales a falta de 5 minutos, en caso de cualquier otro equipo con uno abajo, hubiera supuesto tirar la toalla. Para cualquier equipo si, pero no para el Real Madrid, que se volcó con todo y entre ello, Morata, en boca de muchos por su suplencia canterana, controlaba a cámara lenta una gran asistencia de Varane a pase de Jesé, destacado también en los minutos que estuvo en el verde, empatando el partido con un soberbio golazo, digno de los mejores nueves europeos, reclamando a gritos su puesto en el once. 

El electrónico mostraba los 4 de añadido y todos esperaban el final del partido, con un empate bueno para unos y muy malo para otros; Pero a veces 4 minutos dan para mucho y Cristiano en el 93, disparaba desde la parte izquierda del área con la ayuda involuntaria de Juanfran, que desviaba el tiro y se colaba en la portería de Keylor Navas, poniendo el 2-3 en lo más alto, lo que suponía el éxtasis madridista y la dura desilusión de los levantinistas; Demasiado castigo para el buen partido de los de Caparrós que como otros, se encontraron con ese espíritu que rodea al Real Madrid y que ayer, Morata y Cristiano, volvieron a abanderar.  

FICHA TECNICA:

Alineaciones Levante: Keylor Navas; Pedro López, David Navarro, Héctor Rodas, Juanfran; Simao, Diop; Xumetra, Ivanschitz, Rubén García; Babá Diawará. 
Suplentes: Javi Jiménez; Nikos Karabelas, Vyntra, Sergio Pinto (87') El Adoua, El Zhar (67') Barral (76').
Entrenador: Joaquín Caparrós.  

Real Madrid: Diego López; Arbeloa, Sergio Ramos, Varane, Coentrao; Khedira, Modric, Isco; Di María, Ronaldo, Benzema. 
Suplentes: Casillas, Carvajal, Pepe, Marcelo (58') Illarramendi, Jesé (78') Morata (68'). 
Entrenador: Carlo Ancelotti. 

Goles (57') 1-0 Babá, (61') 1-1 Sergio Ramos, (86') 2-1 El Zhar, (90') 2-2 Morata, (94') 2-3 Cristiano Ronaldo. 

Árbitro: José Luis González González Amonestó a Khedira (min. 44) Arbeloa (min. 51) Pedro López (min. ) y Ronaldo (min. 94) 

Incidencias Sábado 5 de octubre / Jornada 8 de la liga BBVA Estadio Ciudad de Valencia: 24102 espectadores.

Fdo. Toni SPK.