BIENVENIDOS

Hola espero que os encontréis a gusto en este rinconcito donde unos cuantos majaras intentamos sacar ese periodista frustrado que llevamos dentro, el único cometido es que os guste lo que leáis aunque no por ello estés de acuerdo. Lo hacemos con todo el cariño del que disponemos. Así que ser todos bienvenidos y poneros cómodos que estáis en vuestra casa.

Nos podeis encontrar en Twitter, @Blog_VOFC, os esperamos.

Fdo: Carlos el pelijas.

domingo, 2 de junio de 2013

EL HOMBRE QUE NO METIA GOLES.

Eric levantando la "orejona".
El hombre que no metía goles ha ganado partidos que muy pocos ganan, en los que su vida estuvo en juego, en los que ganar o perder lo era todo y salió victorioso, por la puerta grande, sorprendiendo incluso a sus médicos para alegría de todo hijo de vecino. Esto ya nos da una idea de la grandeza del personaje, me explico, a Dios gracias nunca me he visto en una igual y espero que ustedes tampoco, por lo que admiro profundamente a estos ganadores, a esta gente que se agarra a la vida con la fuerza de un titán y que si además están hechos de madera de la buena como es el caso, se les quiere. 

Convendrán conmigo que cuando se conoció su recaída a todos se nos encogió el estómago, fue un golpe bajo que se sintió lleváramos la camiseta que lleváramos. Verlo ahora de corto es un lujo, un gustazo, y lleve los colores que lleve a partir de la próxima temporada cada vez que lo veamos sobre el verde dibujaremos una pequeña sonrisa orgullosa, tiene un trocito de nuestro corazón. 

El hombre que no metía goles es un tipo honrado, nadie lo duda. La RAE define la honradez como rectitud de ánimo e integridad en el obrar, podría ser la perfecta descripción para Eric Abidal. Se va de nuestra liga unos de los mitos que por superar las escarpadas montañas que la vida le ha plantado a traición se ha convertido para todos en un ejemplo: “que se propone, o bien para que se imite y siga, si es bueno y honesto, o para que se evite si es malo (RAE)” – hoy me ha dado por la ahí. La enfermedad siempre es injusta, nadie la merece, pero nos parece un destino aún más miserable cuando cae sobre los hombros de un hombre bueno, un tipo honrado que nunca se ha metido en jardines ajenos, que se ha limitado a hacer su trabajo hasta llegar a ser considerado en su mejor momento como uno de los más grandes. Y siguió siendo discreto e integro, en la salud y en la enfermedad, intachable. 

El hombre que no metía goles, Gampers y Copas de Cataluña aparte, ha ganado a lo largo de su carrera nada más y nada menos que veintidós títulos, tantos como indica su dorsal. Veintidós, qué disparate. Siéntese: Con el Mónaco sumó su primera Supercopa de Francia. Después pasó por el Lille donde estuvo dos años sin levantar nada y para cerrar su periplo francés con el Olympique de Lyon con el que celebró tres Supercopas más y tres campeonatos de Liga, o Ligue 1 como la llaman de los Pirineos para arriba. Aterrizó en aquel Barcelona en liquidación que fue el del último año de Frank Rijkaard y en la temporada siguiente participó de la magia del Pep Team que lo ganó todo, todo, todo. En total con el Barça ha sumado cuatro Ligas, dos Copas del Rey, tres Supercopas, dos Supercopas de Europa, dos Mundiales de Clubs y dos Champions, además, que a nadie se le olvide que también ha sido Subcampeón del Mundo con Francia en Alemania 2006. 

Esto es para leerlo y no creerse la humildad del personaje, cuántos hay por ahí que con una décima parte de este palmarés brutal parecen los gallos del corral, claro que una décima parte de esto es mucha tela, en fin, cada uno es como es y convendrán conmigo que el bueno de Eric Abidal es humilde y noble como un olivo centenario. Se nos va el veintidós, siendo esta la vigésima segunda liga del Barça el vigésimo segundo título de su carrera. Veintidós, veintidós, veintidós… ¿Y cómo estaba la plaza? A reventar para despedirlo como se merece, les cuento: El hombre que no metía goles anoche puso en pie al Camp Nou tres veces, primero cuando salió a calentar, después al entrar por Piqué y finalmente por el cariñoso homenaje que le hicieron. 

Antes de saltar al campo lo vi rezar en la banda como siempre, y pensé ¿cuánto no habrá pedido al cielo este tipo con lo que ha pasado? Me he llenado los ojos de la imagen, es la última vez que lo voy a ver con la zamarreta azulgrana. Ahora me acuerdo de la alegría que nos produjo verlo regresar, fue hace un par de meses, contra el Mallorca, un cinco a cero, pero el marcador importó bien poco, aquella fue una jornada muy especial, Roura la calificó como un día feliz por Abidal y Tito que aquella noche se sentó de nuevo en el banquillo, de hecho esta será siempre la liga de Abidal y Tito. En ese partido vimos la que para mí ha sido la imagen del año, el mister le daba instrucciones en la banda en su reaparición, un momento muy feliz. Una semana antes contra el Celta ya titulé mi crónica como “Sábado de Gloria” solo porque volvía a la convocatoria y lo pudimos ver sonriendo con su chándal entre los suplentes lo que ya era más de lo que esperábamos antes del trasplante. 

Ahora nos dicen que se va. Desconozco los motivos por los que no le dejan seguir con su sueño de jugar al fútbol aquí, ese por el que tanto luchó y que le sirvió de faro y guía para conseguir volver a vestirse corto. He oído de todo y a ciencia cierta no sé nada. Recuerdo que se le renovó en Enero del año pasado cuando parecía recuperado del tumor, antes de la recaída, en cualquier caso, imagino que habrá sido una decisión bastante dura considerando los años que lleva demostrando en el Barça todas las virtudes que le adornan y en las que todos coincidimos. 

Mucha suerte Abidal, juegues donde juegues, estés donde estés, siempre te extrañaremos. Qué momentazo levantando la orejona en Londres, Abi siempre será leyenda en el Barça, gracias. Por cierto que al hombre que no metía goles, para una vez que se acordó de hacerlo, tuvo el detalle de colárselo al Madrid y en el Bernabéu, además fue clave en aquellos cuartos de final y a la postre en la consecución de la Copa (*), si es que te tenemos que querer... 

 (*) Sí, ya lo sé, recuerdo otro que le marcó al Athletic, pero convendrán conmigo que la licencia era irrenunciable.


Fdo : Antonio Porlán Arcos. 

2 comentarios: