ELCHE C.F 0 – F.C. BARCELONA 4. TRÁMITE CUMPLIDO.

Los niños fueron suficiente.

Días después del éxtasis liguero por el triunfo ante el conjunto colchonero el Barça visitaba un desangelado Martínez Valero para cumplir el trámite copero. Sabedores los ilicitanos de su muy bajo índice de éxito, a la hora de poder voltear la eliminatoria, y los culés de que ya les esperaba el Atlético en la siguiente ronda, salvo catarsis inesperada, el partido supuso un hacer acto de presencia y dejar pasar los minutos sin más. Con Fran Escriba rotando a los suyos, pensando más en la liga, y Luis Enrique también, sacando un conjunto muy joven, el único interés que despertaba el choque era contemplar las evoluciones de los canteranos por dejarse ver y mostrar ese potencial que se les supone. 

Ante ese escenario la primera parte comenzaba con un equipo culé llevando el peso del partido frente a un Elche que se mostraba como un simple figurante sobre el césped, sin muchas ganas de entrar en batalla, buscando solamente firmar el expediente. Producto de todo ello, ante la ausencia de las vacas sagradas y efervescencia de los nuevos valores, el partido se convertiría en un constante monólogo visitante donde el joven Adama Traoré, la gran perla culé, se erigiría como la sensación del mismo. Con Adama llevando peligro en cada aparición llegaría el primer gol. Fué en una acción suya donde, recibiendo un pase de Rafinha en profundidad, provocaría su derribo por parte de Albacar. La falta, apenas a unos metros del vértice derecho del área, la aprovecharía un Jeremy Mathieu que, sorprendiendo a propios y extraños, la ejecutaría sacándose un zurdazo que se colaría por la escuadra izquierda de la meta de Manu Herrera recordando la potencia de un mito de antaño como Ronald Koeman y la habilidad de otros como Rivaldo, Ronaldinho o Leo Messi actualmente. 

A continuación el choque seguiría por los mismos derroteros con un Barça presionando y generando llegadas sin apenas peligro hasta que en el minuto 40 Sergi Roberto, la eterna promesa del Barça en la primera plantilla, emergió sumándose a la fiesta para anotar el 0-2 reivindicándose con un obús desde fuera del área que se colaría a media altura sin que Manu pudiese evitarlo. Ese nuevo gol supuso la desconexión mental de unos ilicitanos que, apenas dos minutos después, cometerían penalti sobre un Munir que a principios de año fue la sensación pero que, con el paso del tiempo, se ha ido diluyendo su efecto mostrándose como un jugador insulso e impreciso quizá producto del desánimo y la frustración de haberse visto en el cielo y pasado al infierno en un muy breve periodo de tiempo con la irrupción de Suárez y la reinserción de un Pedro quien, ejerciendo como capitán, lo lanzaría firmando, en el 42, el 0-3 con el que se llegaría al descanso.  

Los segundos 45 minutos comenzarían con Sergi Roberto regalándole una gran asistencia a Adama que este no supo aprovechar, rematando demasiado cruzado, perdiendo así una gran ocasión para subir el 0-4 al marcador “la flecha de Hospitalet”. Esa ocasión pareció espolear a un Elche que, a partir de entonces, pareció encorajinarse forzando un córner en el 49 y propiciando un acercamiento peligroso en el 54 con Albacar metiendo un centro al que casi llega a rematar Coro. Posteriormente a esa acción llegarían cambios por ambos bandos viviéndose unos últimos 36 minutos llenos de imprecisiones, con un Sergi Roberto cogiendo la batuta asumiendo la dirección ofensiva de los suyos, y con Adriano firmando, en el 92, el 0-4. En esa acción el lateral zurdo brasileño cabecearía el centro de un Douglas (bautizado irónicamente como el nuevo Cafú) que hasta entonces había hecho acto de presencia, en sus 31 minutos supliendo a Montoya, sin ninguna incidencia defensiva ni ofensiva siendo un simple figurante. 

Ese último gol supuso la firma del finiquito a un partido muy placido para los barcelonistas, donde lo más interesante fueron los detalles de jóvenes promesas como el debutante Gumbau en el pivote, Adama con su velocidad y desborde y Halilovic en la media punta, y la confirmación del pase a unos cuartos de final donde ahora espera un Atlético de Madrid del Cholo con ánimo de revancha después de lo vivido en el campeonato liguero en el Camp Nou en la pasada jornada.  

Fdo: Jesús Martinez.

FICHA TÉCNICA:

ELCHE FC: Manu Herrera; Peral, Lombán, Pelegrín (Fajr, 80'), Edu Albacar (c); Gálvez (Enzo Roco, 78'), Pasalic (Adrián, 62'), Coro, Álvaro, Fragapane; y C. Herrera.

FC BARCELONA: Ter Stegen; Montoya (Douglas, 62'), Bartra, Mathieu, Adriano; Sergi Roberto, Gumbau, Rafinha; Adama (Halilovic, 62'), Munir y Pedro (c). 

GOLES: 0-1, Min. 21, Mathieu. 0-2, Min. 40, Sergi Roberto. 0-3, Min. 43, Pedro (p). 0-4, Min 90+2, Adriano. 

ÁRBITRO: Santiago Jaime Latre (Comité Aragonés). Asistido en las bandas por Jorge Bueno Mateo (Comité Aragonés)y Francisco Javier García Sabuco (Comité Navarro). Cuarto árbitro, Eduardo Moya Baena (Comité Andaluz). Mostró tarjetas amarillas a Albacar (20') por una zancadilla a Adama Traoré cuando se iba solo hacia la meta rival; a Peral (29') por una entrada por detrás a Pedro; y a Adriano (64') por derribar a Coro. 

 INCIDENCIAS: Estadio Martínez Valero, 13.446 espectadores.