REAL MADRID 3 - FC BARCELONA 0. FESTÍN BLANCO.

En esta ocasión el duelo cayó de lado del portugués.

Como en los buenos congresos gastronómicos el Bernabéu esperaba con ansiedad el poder darse un buen festín ante su eterno rival. Con un ambiente que rezumaba aroma a lo mejor de las bodegas y productos internacionales se presentaban madrileños y catalanes a la cita. Para poder conquistar a los paladares más refinados el chef visitante sacaba a relucir una variedad uruguaya buscando sorprender, formando un cóctel explosivo aromatizado, junto a la chispa argentina y el entusiasmo brasileño. Testigos de ello, los locales jugaban sus bazas buscando evitar el “efecto sidrina” con el suyo, italiano, intentando anular los efectos secundarios cocinando un sorprendente menú que iría aderezado con un fino toque francés y la fuerza de la buena materia prima portuguesa. 

El duelo comenzaba y el primero en dar era el visitante. Sin duda su plan inicial estaba surtiendo efecto pues un toque de seco vino uruguayo había valido para mezclar formando ese cóctel explosivo que el entusiasmo brasileño se había encargado de hacer valer. Lejos de amilanarse el anfitrión tiró de orgullo y en un breve tiempo hizo méritos suficientes para nivelar la balanza sin que estos se viesen reflejados en el resultado. Fruto de ese transcurrir sus nervios empezaron a aflorar ante un fuerte oponente que tampoco supo aprovechar esos instantes de debilidad y duda para ampliar la brecha en el duelo a cara o cruz. Los minutos pasaban y nada cambiaba hasta que de pronto el ingrediente “picanton” hizo saltar las alarmas de su equipo, encendiendo a los suyos, ante la algarabía de un rival que veía como volvía a meterse de lleno en él. Con la balanza nivelada, saltando en el hilo musical el sonido del fado para festejo de los allí presentes, se llegaba al ecuador.  

Tras un breve parón el “efecto sidrina” y el extra de ingrediente “picantón” pareció volverse en contra para disgusto de un chef visitante que asistía abrumado presenciando como su creación se había venido abajo ante su desilusión y la de sus fieles seguidores. Es lo que pasa cuando a un cocinero se le va la mano en las medidas de los ingredientes, cocinando entre fogones, pues por más que se quiera reparar el daño la receta nunca vuelve a alcanzar su súmmum de placer. El daño estaba hecho y el italiano aprovechaba para seguir mejorando su receta metiendo más el dedo en la llaga de su adversario. Sin duda el toque francés estaba marcando las diferencias haciéndose el amo y señor de los paladares que tenían la fortuna de poder catarlo ante la desesperación de quienes estaban sufriendo sus efectos contemplando, desde la distancia, el gran resultado que estaba dando poniendo tierra de por medio entre unos y otros.  

Era tal el nivel de zozobra que en un momento estratégico volvía a saltar el fado en el hilo musical ampliando más aún las diferencias entre unos y otros. Eso pareció poner contra las cuerdas a un visitante que no encontraba soluciones a sus males, moviéndose como si se tratase de un boxeador sonado en el ring, manteniéndose a duras penas en pie y viviendo en el alambre gracias al auxilio y pundonor de su “jefecito”. La diferencia en puntos era mínima pero la diferencia de sensaciones era abismal. Cierto es que un simple detalle, sacado de la chistera, habría podido volver a colocar las cosas en un empate técnico. Sin embargo eso no se dio fundiéndose así las esperanzas tanto como si se hubiese caído entre los fogones una muestra de un buen queso. Henchidos de satisfacción unos, con su oponente mostrándose impotente, los últimos minutos valdrían para certificar el premio al mejor menú, poniéndole la guindilla a este, dándose así un festín digno de los paladares más exigentes para regocijo de unos asistentes que de hoy en adelante valorarán mejor el fino toque francés. 

Fdo: Jesus Martinez.


FICHA TECNICA:

REAL MADRID CF: Iker Casillas; Carvajal, Pepe, Ramos, Marcelo; James Rodríguez, Kroos, Modric (Arbeloa, m.88), Isco (Illarramendi, m.83); Benzema (Khedira, m.86) y Cristiano Ronaldo.

FC BARCELONA: Claudio Bravo; Alves, Piqué, Mascherano, Mathieu; Busquets, Xavi (Rakitic, m.60), Iniesta (Sergi Roberto, m.72); Luis Suárez (Pedro, m.69), Messi y Neymar. 

ÁRBITRO: Jesús Gil Manzano (Comité Extremeño). Amonestó a Messi (m.9), Neymar (m.14), Piqué (m.34), Iniesta (m.38), Carvajal (m.74) y Cristiano Ronaldo (m.92).

GOLES: 0-1, M.4: Neymar. 1-1, M.34: Cristiano Ronaldo, de penalti. 2-1, M.50: Pepe. 3-1, M.61: Benzema. 

INCIDENCIAS: Partido de la novena jornada de la Liga disputado en el Santiago Bernabéu ante unos 81.000 espectadores.