 |
| La saeta rubia, leyenda viva del fútbol mundial. |
La noticia corría como un reguero de pólvora entre los medios de comunicación y redes sociales encogiéndosenos a muchos el corazón con independencia de los colores y el escudo de nuestro equipo. Porque el deporte entiende de rivalidades pero por encima de todo de la generosidad en el esfuerzo y del respeto mutuo siendo este un referente de la convivencia pese a que siempre haya algunos que se empeñen en querer demostrar lo contrario cometiendo actos de dudosa ética. Y es que el fútbol sin “la saeta rubia” (apodo con el que se le conocía) no sería lo que es hoy en día. Fue el primer exponente del cambio, de la primera revolución, el líder de un histórico equipo que dominó Europa. Junto a él crecieron otros grandes mitos como Gento, que a su lado aprendieron en el día a día perfeccionando su técnica. Con él, otro mito llamado Ferenk Puskás, firmaría una temible dupla goleadora que llevaría al club a sus mayores logros deportivos. Fue una época dorada del madridismo donde firmaría un épico duelo contra el húngaro Ladislao Kubala, ídolo del barcelonismo, en una de las rivalidades más estelares compitiendo ambos codo con codo. Grandes rivales en la cancha, sorprendía ver como fuera de ella mantenían una gran amistad demostrando así los grandes valores y esencia del mundo del deporte. Gracias a esa gran competitividad entre ambos era increíble ver como se llenaban los estadios por un público que quería asistir como fuese a contemplar el gran espectáculo deportivo con el que deleitaban a sus fieles y que alimentaba ilusiones y sueños en épocas de mucha miseria en una sociedad que vivía sumida en la dictadura.
Tal era la admiración que despertaban que, bajo su influencia, se produjo la primera ampliación del Santiago Bernabéu en 1954 para acoger a 125.000 aficionados y la construcción del Camp Nou, en Barcelona, tras quedarse pequeño el antiguo estadio de Les Corts con capacidad para 60.000 espectadores. Aquellos duelos fueron el preludio de otros históricos como el que actualmente mantienen Messi y Cristiano Ronaldo. Futbolista todo terreno por su dominio del juego abarcando una amplia parcela sobre el campo, moviéndose entre líneas, Alfredo era capaz tanto de asistir a sus compañeros como de perforar la meta rival con igual eficacia debido a su prodigiosa técnica y lectura del juego. Como revolucionario de este deporte nos dejó un gran detalle técnico como su principal recurso para resolver situaciones de emergencia. Ese recurso fue el toque de tacón convirtiéndose este en su sello distintivo. Posteriormente a él llegarían Pelé, Johan Cruyff y Maradona cogiéndole el testigo como grandes iconos en sus respectivas épocas. Todos ellos y otros grandes como el portugués Eusebio, el brasileño Garrincha, el alemán Beckenbauer, el irlandés George Best o el británico Bobby Charlton han sido los precursores del cambio en este deporte y el espejo en el que se mirarían muchos de los futuros cracks que de ellos aprendieron, viéndoles jugar, como Van Basten, Zidane, Maldini o Ronaldinho. Porque sin todos ellos no se podría entender al fútbol actual como el negocio que es hoy en día moviendo tantos millones y levantando tantas pasiones.
Ante ello solo nos queda agradecerle esa gran parte de su vida que nos ha regalado, obsequiándonos con sus años de enseñanza mostrándonos su gran fútbol, y desearle una pronta recuperación en estos momentos en que su delicada salud se ha visto afectada llevándole ésta a disputar un nuevo partido que deseamos sea vencido. Porque pese a haber sido el líder de su equipo y el máximo exponente como rival de otros es indudable que las personas están por encima de las rivalidades.
Por todo ello… ¡Ánimo viejo!, ¡aguante che y sepa, D. Alfredo, que no somos pocos los que estamos con usted!.
Fdo: Jesús Martinez.
ALFREDO DI STEFANO, LEYENDA DEL FUTBOL. AQUI PUEDES VER UN VIDEO HOMENAJE: https://www.youtube.com/watch?v=uwwduwhQIKk
Que bonita dedicatoria (aplausos)....
ResponderEliminarPrecioso Jesús, ánimo Don Alfredo!
ResponderEliminar