FC BARCELONA 6 - CELTIC FC 1. EL REENCUENTRO.

Neymar besa el balón del Hat-Trick.

En una fría noche otoñal el aficionado local asistía una vez más con la esperanza de poder indultar a un equipo por él castigado cuál persona delictiva obligada a hacer pequeñas obras para su reinserción social. El cada vez menor público asistente en las gradas del Camp Nou acudía al estadio muy expectante a la par que escéptico sobre el juego que se le iba a ofrecer y por ello el plantel se sabía muy exigido como demuestra el talante ofuscado del Tata en sus declaraciones previas al partido. El run-run que se había levantado tanto en grada como en medios de comunicación deportivos, en eso a lo que otros llaman entorno, se había apoderado tanto del argentino como de una plantilla que se mostraba muy confiada sobre su capacidad aunque no reflejase en el campo, como antaño, su calidad. Conscientes del cariz que estaban empezando a tomar los acontecimientos sabían que tenían que dar un golpe de efecto para intentar revertir la situación recuperando así la credibilidad que estaban perdiendo a pasos agigantados tanto a ojos del aficionado como de sus medios de comunicación más afines. 

Para tal inyección de moral acudía el Celtic Glasgow. Sin duda el conjunto escocés partía como una víctima propiciatoria ya que lejos de su estadio y jugando en un recinto de mayores dimensiones, como es el feudo barcelonista, es un equipo que baja muchos enteros ante rivales como el culé. Los escoceses no tardaron en demostrar esas previsiones pues a los 7 minutos el Barça se adelantaba con un gol de Piqué tras marcar a placer un rechace del portero Forster a un chut de Alexis. Era el tanto número 1.000 de los blaugrana en competición europea. Ese gol supuso un jarro de agua fría para el conjunto visitante pues ello le obligaba a cambiar sus planes. Ya no valía poner el muro atrás y esperar a los espacios que el Barça dejaría en defensa para intentar aprovecharse en alguna contra. El guión había cambiado siendo ahora el conjunto escocés el que tendría que hacer un fútbol al que no está acostumbrado como es el de arriesgarse a dejar más espacios atrás adelantando sus líneas para buscar el empate desde muy temprano. Sin duda ese nuevo escenario, con más huecos, se había tornado como el ideal para dominar por parte de un equipo como el Barça que con su fútbol de toque rápido comenzaba a crear peligrosos acercamientos al área rival con la velocidad de sus puntas Pedro, Alexis y Neymar. Eso provocó que el público comenzase a despertar del letargo en el que vivía asiduamente esta temporada, recordando así flashes de mejores tiempos pasados y es que... Xavi volvía a dominar el control del juego como antaño, Sergi Roberto seguía reivindicándose como una opción muy a tener en cuenta asociándose muy bien con sus compañeros en la medular, Pedro volvía a ser ese jugador electrizante y llegador de antaño y Neymar empezaba a resbalar menos sobre el césped intentando echarse el equipo a la espalda.

Arrinconando a los escoceses en su campo, quedándose el Barça con el balón, las jugadas morían en las cercanías del área una y otra vez ya fuese por precipitación barcelonista, en los últimos metros (especialmente por un Neymar extra motivado), o por buenas acciones defensivas de los visitantes que se defendían con uñas y dientes intentando sacudirse el dominio local. Tanto fué el cántaro a la fuente que en los últimos cinco minutos del primer tiempo el Barça dejaría el partido visto para sentencia, salvo hecatombe, cayendo el segundo y el tercer gol de forma casi consecutiva, marcando Pedro en el 40 en una jugada en la que Neymar se va de Ambrose en el área con un cambio de ritmo y escorándose a la derecha cediéndole el balón al eje del área para anotar el 2-0, llegando el canario desde atrás, y anotando el 3-0 el brasileño tras levantar el balón Alexis por encima de la defensa dándole un excelente pase en profundidad a Montoya para que éste, a su vez, le cedería el balón a Neymar que marcaría en una posición similar a la de Pedro en el segundo. 

Tras llegarse al descanso con ese contundente resultado de 3-0 la segunda parte comenzaría con un Celtic que parecía haber dimitido del partido bajando alarmantemente los brazos. Si a eso le sumamos la euforia con la que había salido al campo un equipo azulgana necesitado de revivir grandes noches europeas podíamos presagiar que se iban a dar los alicientes ideales para que los delanteros azulgrana pudiesen lucirse aumentando la diferencia en el marcador con gente como Pedro mostrando su movilidad y habilidad para llegar al área pequeña para golear, Alexis con su juego de presión y asociándose bien con sus compañeros para asistir y Neymar con su variado repertorio de fintas y regates. Los presagios no tardaron en confirmarse cuando en el minuto 48, Neymar pasa de tacón a Xavi que de primeras le devuelve el esférico para remachar con la derecha el 4-0 el brasileño. Con un Neymar eléctrico, sumido en un estado de puro éxtasis, llegaría la manita en el 58 al recibir este en el pico izquierdo del área un pase en corto de Adriano desde la banda para internarse en ella haciendo una jugada individual y rematando a puerta colándose el balón en el arco rival tras tocar en un Ambrose que intentaba despejar bajo palos. Era su reconciliación con el gol, firmando su primer 'hat trick' como blaugrana, y se notaba en la celebración de cada uno de los tantos viéndose como si el brasileño se hubiese quitado un peso de encima al empezar a pesar sobre él una fama de gran llegador pero no muy buen finalizador. Sin duda el conjunto escocés estaba siendo un bálsamo perfecto para que el Barça pudiese reencontrarse con una afición que acabó satisfecha por reconocerse en su equipo. De ahí al final lo más destacado fueron los goles de un recién entrado "unijugada" Tello (ese jugador que siempre encara en velocidad amagando irse hacia un lado para luego marcharse hacia el otro buscando la línea de fondo tras un cambio de ritmo) marcando el 6-0 en el minuto 71 al recibir un centro de Adriano y colarse su disparo en la portería tras tocar en Van Dijk, y el 6-1 de Samaras en el minuto 87 donde recibió un centro de falta de Mulgrew desde el lateral derecho del ataque del Celtic para anticiparse a la dormida defensa barcelonista cabeceando sin oposición y a placer a la red. 

Sin duda fué una noche muy placentera para el aficionado al asistir a un encuentro en el que, más allá del gol del honor del Celtic en los últimos minutos, apenas padeció algún susto ante el poco trabajo que tuvo Pinto. Una noche de reencuentros en la que se volvió a ver la magia de Xavi, la chispa de Pedro, la sobriedad de unos discutidos Mascherano y Piqué, la reivindicación de jóvenes como Montoya y Sergi Roberto como recambios de garantías para gente como Alves, Iniesta o Cesc si se les da confianza y en la que la afición del Barça despidió con una sonora ovación a Neymar tras ser sustituído por el canterano Dongou recibiendo el reconocimiento de su técnico y la grada tras su gran partido. 

FICHA TECNICA:

ALINEACIONES: 

FC BARCELONA: Pinto; Montoya, Piqué, Mascherano, Adriano; Xavi (c), Busquets (Song, 72'), Sergi Roberto; Pedro, Alexis Sánchez (Tello, 63') y Neymar (Dongou, 80'). 

CELTIC FC: Forster, Matthews (Stokes, 81'), Ambrose, van Dijk, Lustig, Biton (Commons, 68'), Brown (c), Ledley, Samaras, Boerrigter, Pukki (Mulgrew, 46'). 

ÁRBITRO: Sergei Karasev (Rusia). Asistido en la bandas por Tikhon Kalugin y Anton Averianov (Rusia). Cuarto ''arbitro, Dmitri Mosyakin (Rusia). Mostró tarjetas amarillas a Brown (40'), Sergi Roberto (41') y a Matthews (68'). 

ESTADIO: Camp Nou, 54.342 espectadores

Fdo. Jesús Martinez.