 |
| Un gol que puede valer la permanencia. |
Los de Jim habían cogido algo de aire tras vencer al Español, por lo que no podían dar por perdido el partido y miraban al Valencia como espejo donde mirarse; Juan Ignacio Martínez no podía contar con Manucho por molestias, y pensando en el compromiso frente al Betis ya descendido, y con la ausencia de Rossi por sanción. En los visitantes, Carvajal se caía de la convocatoria por una sobrecarga después de grandes actuaciones, que sumado a la baja preocupante de Varane, hacia que Nacho fuera la única posibilidad real para la banda derecha; causaba baja también Gareth Bale, y el debate en el centro del campo se zanjaba con la vuelta de Luka Modric e Isco de nuevo en el once.
Casillas volvía a la titularidad en liga, después de más de un año en la suplencia desde su lesión, con Diego López como observador en el banco.
La primera la tuvo Javi Guerra con un cabezazo que salió muy cerca del marco de Iker Casillas, tras un fallo múltiple en defensa. Tan solo 7 minutos antes de una de las anécdotas (por no decir catástrofe) de la noche, justo cuando Cristiano Ronaldo se quedaba clavado y pedía el cambio; el banquillo del Madrid se levantaba en pleno y esperaban la salida del luso para recibir sus impresiones, pero a primera vista se resintió de las molestias en el bíceps femoral y las sensaciones iniciales no eran buenas. Se produjo el primer cambio obligado del encuentro y Ancelotti dio entrada a Morata, mientras Ronaldo se quedaba en el banquillo para animar a sus compañeros, desprendiendo cierta tranquilidad respecto a la lesión.
Con ello por sí no fuera bastante, los blancos siguen en su modo "slow" y viviendo en la espesura del cansancio y con la orejona de Lisboa en la cabeza; Di María en los merengues y Bergdich en los blanquivioletas eran los protagonistas en sus escuadras, y mientras los blancos dominaban y llegaban, sin mucho peligro pero llegaban, los de casa tampoco pasaban excesivos apuros. El partido contra el Valencia estaba presente y la pólvora gastada contra el Bayern parece haber vaciado el polvorín blanco; se producen los mismos porcentajes de ocasiones, pero sin la frescura y el avasallamiento al que sometía a los rivales. Y volvió al rescate un defensa; esta vez de falta directa y sin estar el lanzador oficial en cancha, Ramos tomó la responsabilidad o plantó el brazalete y se sacó un buen disparo por encima de la barrera, que tras ver repetido, evidenciaba falta de acierto por parte de Jaime. Pero el gol valía igual y mucho, aunque a estas alturas de la temporada y con tanta "fatiga mental" los goles a favor parecen goles en contra. Y Ramos estuvo a punto de rematar la faena al filo del descanso, en un córner que remataba alto por poco.
Nos marchábamos a vestuarios con un regusto a incertidumbre, como el vivido en Mestalla, aunque la situación del Valladolid y el gol a favor hacían pensar que el Madrid no caería en el error en el que cayó, relajarse de nuevo.
El segundo tiempo tenía a Morata como el que intentaba cosas y no le salía ninguna, a Benzema que, disculpando al jugador, hace tiempo que su frialdad junto al desgaste le ha hecho perder toda efectividad y Jeffren en los de Jim, que empezaba a crear algo de peligro entre líneas.
Con añoranza de su patria y del fútbol en el que nació, y siendo honestos, por la baja y consecuente salida de Ronaldo del campo, Ancelotti optó por hacer lo que creía que debía hacer, amarrar el resultado; Illarra tenía otra una oportunidad y entró por un señalado Isco, que realmente está en la línea de todo el equipo, y Marcelo dio descanso a un Benzema desganado y frustrado. Si bien Marcelo, que ocupó la banda del francés por delante de Coentrao y dejó la punta para Morata, pareció aportar ese "desorden" que muchos alaban del brasileño, en un equipo plano sirve de poco. Muchos seguimos echando de menos ver más minutos en el campo a Casemiro, un jugador poderoso físicamente con buen dominio del balón y que le ha pesado poco no jugar y tener por ejemplo que salvar el partido en Dortmund, pero a Carleto parece no encajarle. La causa de la derrota no fueron los cambios, porque eran los lógicos y porque si el Madrid hubiera ganado, los ensalzanzaríamos, pero si hay que reincidir en la mala gestión física de una gran plantilla; las bajas no son justificaciones, sino consecuencias, en la mayoría de ocasiones consecuencias de la sobrecarga de minutos y/o falta de descanso, el caso más claro es el de Ronaldo, contra jugadores que prácticamente no la han olido.
Como dijo Jim sin tapujos en rueda de prensa, "hemos metido un miedo que el mister contrario con los cambios ha demostrado"; fuera lo que fuera el Madrid se echó a atrás, se relajó y en el 84 llegó el masaje sin final feliz; Osorio remataba un centro dentro del área con 3 defensas saltando a la vez sin rozar al jugador, y además el remate tocaba en un perdidísimo Illarra y se colaba quizá pudiendo haber hecho más Casillas. Esta muy bien intentar chilenas, rematar todos los córners a favor, pero en el club blanco y desde hace años, los defensas defienden poco.
De ahí al final muchos gritos, muchas indicaciones, muchos jugadores colgando balones pero el empate era justo; los propios jugadores reconocieron tras el partido que se "relajaron", que faltó "concentración final" etc etc y su entrenador recurrió a la"fatiga mental" "lesiones" y más etc, pero los jugadores del Real Madrid llevan ya varias temporadas alegando las mismas circunstancias que se hacen intolerables con la liga en la mano y frente a un equipo al borde del abismo como el Valladolid, o en casa contra un "ajeno a la competición" como el Valencia. Pocas veces tendrán el triplete tan cerca como lo han tenido ahora, y digo triplete, porque parece que esa dejadez en la liga está sustentada en que la final de Champions ya se ha ganado, factor que puede costar una debacle si se pierde y solo se guarda en las vitrinas la honrosa copa del rey.
FICHA TÉCNICA:
REAL VALLADOLID: Jaime; Rukavina, Valiente, Mitrovic, Peña; Álvaro Rubio, Pérez (Baraja, min.82), Jeffren (Osorio, min.74), Óscar (Larsson, min.64), Bergdich y Javi Guerra.
REAL MADRID: Casillas; Nacho, Pepe, Ramos, Coentrao; Xabi Alonso, Modric, Di María; Isco (Illarra, min.73), Benzema (Marcelo, min.77) y Cristiano (Morata, min.8).
GOLES: 0 - 1, min.35, Sergio Ramos 1 - 1, min.85, Osorio
ÁRBITRO: Gil Manzano (C.Extremeño). Amonestó a Bergdych (min.26), Mitrovic (min.89) y Baraja (min.92) en el Valladolid y a Isco (min.27), Morata (min.61), Illarramendi (min.76) y Pepe (min.80) por parte del Real Madrid Real Madrid.
INCIDENCIAS: Jornada 34ª aplazada de la liga BBVA, miércoles 7 de mayo. Estadio Nuevo Zorrilla. 22.013 espectadores.
Fdo: Toni SPK.
No hay comentarios:
Publicar un comentario