 |
| ...Y Cristiano se elevó a las alturas. |
Los valencianos llegaban a Madrid con una envidiable racha de 8 partidos invictos, y la doctrina Caparrós como único mandamiento, solidez defensiva incansable y si se puede se ataca, si no se puede...seguimos defendiendo; a mi me gusta, pero lo que en otros entrenadores es cobardía o tacañería, en los "bien caídos" es oficio, experiencia y sacar el máximo partido a lo que tiene. Con estos barómetros de opinión, no entiendo a los que nombran al utrerano como artífice del gran euro-Sevilla, cuando los títulos los ganó el “mal caído” Juande Ramos.
Y es que perderse en errores arbitrales, que los hubo, como análisis del encuentro de ayer, sería no entender que con rachas de más del 80% de posesión sumado a más de 15 ocasiones de gol y tres goles, es casi imposible sacar algo positivo de la Casa Blanca, más cuando en el minuto 7, Keylor Navas, el portero revelación de la liga, acometió el primer paradón del partido a remate de Cristiano Ronaldo, evitando el primero de la tarde. Primero que no se haría esperar, y es que me cuesta recordar cuando fue el Real Madrid un equipo peligroso a balón parado, lo que ha cambiado radicalmente desde que Ángel Di María sirve tanto las faltas escoradas como la mayoría de los córners, no sólo asistiendo, también creando mucho peligro. Pues eso, Di María centra y Morpheo (Ronaldo) se suspende y para la cámara para cabecear y estrenar el videomarcador, contra el que nada pudo hacer el portero levantinista pese a rozarla. 1-0, minuto 11.
Los de Caparrós recibieron un temprano golpe, lo que tampoco suponía un gran desbarajuste para sus planes, no variarían ni un ápice la estrategia, daban por supuesto que encajarían al menos un gol y que serían dominados, así que esperarían agazapados a la espera de fallos o de relajación por parte de los locales; relajación que no aparecía y los fallos ocurrían en parcela propia, lo que hacía muy remoto el llegar al marco de Diego López con cierto peligro. Los de Carleto siguen sin deslumbrar, pero sí manejan a su antojo las transiciones, los once granotas estuvieron muy pronto en su área muy juntos, con un David Barral a años luz de cualquier enlace con sus compañeros; Modric continua en un estado de forma idílico, sobre todo cuando siquiera tiene presión en el centro del campo como sucedía ayer, y era cuestión de tiempo que llegaran más dianas. Los visitantes reclamaron una jugada comprometida, tras una falta de Sergio Ramos a Pedro López en el centro del campo, que producía un pase a Barral a 30 metros del marco merengue pero que Iglesias Villanueva cortó sin aplicar la obligada ley de la ventaja, pero siendo honestos y aunque resulte extraño, no hubo falta de Ramos, que dedicó otros plácidos 90 minutos en busca del salvoconducto al clásico en forma de tarjeta amarilla.
Con el cronómetro sobrepasando los 45 minutos, otro centro de Marcelo al área, a punto estuvo Benzema de convertirlo en el 2-0, pero Keylor Navas volvió a desplegar sus habilidades y rozó lo justo para desviar al palo el cabezazo del jugador galo. 1-0 y a vomitorios.
El equipo blanco, resultado al margen, demostró en la tarde de ayer que pueden apretar y mantener la tensión durante gran parte de los encuentros, evitando así cualquier error irreparable o imagen de sobrados, en la liga de los “Top” de Europa ya no sirve jugar bien 30 minutos y echarse a dormir.
Con lo que recién iniciada la segunda parte, Modric ponía en la mesa la escuadra y el cartabón y cambiaba el juego con un pase largo de exterior que no controlaba el simpático Marcelo y recuperaba Ronaldo, que pegado a la cal izquierda, se llevaba a dos defensa con él y entre medio de los dos devolvía al brasileño para que éste, con un genial amago a Navarro dentro del área, disparara con la derecha y la enchufara por el palo largo del portero costarricense marcando un gran gol. 2-0 y con ese resultado si se disipaba cualquier atisbo de competencia si con el 1-0, los visitantes solo habían llegado una vez “clara” ante el meta gallego, casi inédito. En un choque con poco roce y simples empujones y miraditas, David Navarro entró por detrás a Cristiano, con o sin posibilidad de jugar el balón y el colegiado gallego mandó a la ducha al defensa valenciano, lo que acabó con el entrenador andaluz tocándose la carita a modo mofa y enfrentado con algunos aficionados que querían “debatir” la jugada; tras la repetición pareció rigurosa la expulsión pero el veterano central fue víctima del cuento del lobo.
Faltaba escuchar la alarma de los cambios a partir del setenta, para ver a los Isco, Illarra “El torero” o Jesé, pero el que contó con unos minutos de más fue Nacho, que cubría el cambio de Varane, como medida preventiva tras una tarascada peligrosísima en su rodilla derecha y que dejó renqueante al joven defensa; el resto, Isco y Jesé contaron son sus quince y diez minutos de rigor.
Benzema no disfrutó de la suerte del gol, pero como en gran parte de esta temporada, no dejó de buscarlo, el francés ha entendido que puede aportar muchas cosas además de los goles, pero se tenía que obligar, el introvertido delantero es un espejismo del jugador de los últimos 4 años, ha tardado demasiado pero parece haber tomado la responsabilidad que se le presupone al 9 del Real Madrid, gran temporada del internacional bleu.
Con el palo de la primera parte y dos ocasiones más para el ex-lyonne, volvió a tenerla de cabeza con un centro suave de Carvajal pero esa vez se fue al travesaño; no perdía ni un minuto y en la siguiente jugada remataba en boca de gol y a placer al muñeco, sumando Keylor Navas su trigésima parada y otro goluy de Karim Benzema. El polivante, multipleasistente y centrador Angel Di María, en otro partido de sobresaliente, iniciaba un slalom sufriendo una falta para que recuperara Marcelo, que centró de nuevo y Nikos Karabelas marcó a placer en su propia portería. 3-0 y el líder no cesaba en su ofensiva. Cristiano quería su segundo como dedicatoria a su familia, presente en el estadio y terminó mandando la última al travesaño en el noventa.
Pero no acababa todo en alegría cuando Carvajal, recuperando la posición lejos de todo, caía bruscamente como si hubiera recibido una descarga y los servicios médicos saltaban para asistir al canterano; lo que parecía una lesión grave de rodilla por el gesto, acabó en un pinzamiento en la cadera, que promete una evolución favorable, si bien ahora mismo, Ancelotti no podría contar con ningún lateral derecho titular, con Carvajal y Arbeloa lesionados.
Pitó Iglesias Villanueva y los madridistas son más líderes, respecto al Barça que está a cuatro y los colchoneros al rebufo, restando menos fechas en el calendario y a 14 días de un clásico, que de quedarse en el Bernabeu, podría asestar el tiro de gracia a los culés en pos de dejar la pelea en cosa de los dos conjuntos de la capital.
FICHA TECNICA:
REAL MADRID: Diego López, Carvajal, Varane (Nacho, Min. 69), Ramos, Marcelo, Modric (Isco, Min. 73), Xabi Alonso, Di María, Bale, Cristiano, Benzema (Jesé, Min. 81).
LEVANTE UD: Keylor Navas, Vyntra, David Navarro, Juanfran, Nikos, Pallardó (El Adoua, Min. 68), Sissoko, Sergio Pinto (Nagore, Min. 73), Ivanschitz, Pedro López y David Barral (Ángel, Min. 87).
GOLES: 1-0, Min. 11, Ronaldo 2-0, Min. 49, Marcelo 3-0, Min. 80, Karabelas (P.P.)
ÁRBITRO: Ignacio Iglesias Villanueva (C. Gallego), amonestó a Ramos (Min. 53) y a Di María (Min. 58) por parte del Real Madrid y a Vyntra (Min. 59) y a Pallardó (Min. 62) por parte del Levante. Expulsó con roja directa a David Navarro (Min. 63).
INCIDENCIAS: Estadio Santiago Bermabeu, 74.247 espectadores. Jornada 27ª de liga BBVA, Domingo 9 de marzo de 2014.
Fdo: Toni SPK.
No hay comentarios:
Publicar un comentario